Luego del triunfo ante Pachuca que le dio el boleto a los cuartos de final en la Copa MX, América volvió a los entrenamientos para preparar el partido de mañana contra Morelia y lo hizo con dos piezas importantes que avanzan satisfactoriamente en su recuperación. Se trata de Mateus Uribe y Jérémy Ménez, quienes han estado con trabajo al parejo del grupo en los días más recientes, pero todavía no cuentan con el ritmo necesario para entrar en la convocatoria del técnico Miguel Herrera.
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Tanto el colombiano como el francés estuvieron desde el comienzo del entreno. El torito, los tiros a gol y el interescuadras los completaron sin dificultad alguna, muestra de que las lesiones han sido superadas y es cuestión de tiempo para su reaparición. A la hora de los ejercicios de definición, el galo se dio tiempo para hacer muestra de su depurada técnica individual al rematar a gol con una vaselina que intentó desviar el arquero Óscar Jiménez, pero no lo consiguió. Mucho esfuerzo de los camisetas 8 y 7 de los azulcremas; sin embargo, están descartados para el encuentro con Monarcas, ya que todavía es prematuro pensar que puedan participar.
El que se ve en mejor estado es Uribe dado que su tiempo sin actividad fue menor, cosa que quedó de manifiesto con el hecho de que terminó los espacios reducidos, mientras que su compañero presentó una mayor fatiga y tuvo que parar.
Afinan la puntería en el Nido amarillo
La pólvora se volvió a encender en el Nido. Y es que tras dos partidos al hilo sin haber anotado, América se reencontró con el gol y ha marcado ocho tantos en sus últimas dos presentaciones (tres en Liga y cinco en Copa), por lo que ese buen momento quieren mantenerlo este viernes en su visita a Morelia. En el entrenamiento de ayer, gran parte de la sesión de trabajo fue dedicada a rematar de cara al arco.
Movimientos dentro del área, parejas de rematadores, centros desde los dos costados, tiros de todo tipo para exigir a los porteros, repetición tras repetición para buscar perfeccionar ese aspecto.
Henry Martín se vio certero; Nicolás Castillo conectó la pelota de buena forma por aire y por tierra; Jérémy Ménez definió de lujo. Cada quien con sus armas, pero en busca de tener el tino lo más dirigido posible. Por cierto, Martín, sin tanto ruido, continúa con su aporte goleador.
Gran parte del despertar ofensivo americanista obedece al rendimiento de sus centros delanteros. Y es que cada uno se ha despachado con un doblete en sus más recientes presentaciones. Primero fue Nicolás Castillo, posteriormente Henry Martín y Roger Martínez, por lo que se estima que repitan en el ataque.