Barcelona, España.- El Barcelona selló el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey tras golear con comodidad al Leganés en el Camp Nou (5-0), donde el proyecto de Quique Setién recobró la verticalidad y tomó aire después de la derrota liguera contra el Valencia.
El equipo azulgrana, más incisivo en ataque, sentenció al equipo 'pepinero' con los goles de Clément Lenglet y Antoine Griezmann, en el primer tiempo, y Lionel Messi, por partido doble, y Arthur Melo, tras el descanso.
Cambió el libreto Setién y, de una línea defensiva de tres jugadores, recuperó el 4-3-3 más clásico. Se notó en el césped. Messi, con libertad por la derecha, Griezmann, de 'nueve', y Ansu Fati, desequilibrando por la izquierda, dieron a su equipo la profundidad que faltó en los primeros tres encuentros del técnico cántabro en el banquillo azulgrana.
Un equipo con más verticalidad y menos académico con el control del balón, aunque sin fiabilidad en defensa. Prueba de ello fueron las seis llegadas que completó el Leganés en el primer tiempo. La primera a los 30 segundos del encuentro.
No marcó el Leganés en la primera ocasión que tuvo, sí lo hizo, en cambio, el Barcelona en el minuto 4. Mandaron las áreas. Messi buscó al espacio a Semedo, buscando al área a Griezmann, que cruzó el balón con la diestra para dar la primera alegría de la noche a un Camp Nou medio vacío.
El francés, muy participativo trazando desmarques al espacio, volvió a rematar otra combinación de Messi con Alba, pero el colegiado anuló el tanto por fuera de juego del lateral catalán.
Con De Jong, inseguro en la medular, los pupilos de Quique Seitién buscaron el segundo, ya fuera con un desmarque al espacio de Griezmann o, a balón parado, con la conexión Messi-Lenglet.
En dos faltas, el argentino contactó con la testa del francés, que en ambas ocasiones remató alto. A la tercera fue la vencida. Messi, esta vez en un córner, diseñó un centro milimétrico al central, que peinó con elegancia para anotar el segundo (min.27).
Un tanto que acercaba al Barça a los cuartos de final en menos de media hora de partido. Pese a ello, el conjunto aguantó antes del descanso, sabiendo frenar a Messi y buscando, sin pegada, sus opciones en las lagunas ofensivas.
Ante el tedio, Aguirre movió el banquillo en el minuto 57, dando entrada a Kevin Rodrigues y Eraso. Dos cambios que precedieron el tercer tanto de azulgrana.
De Jong, gris en el primer tiempo, se reveló con una asistencia profunda a Messi. El rosarino trazó a trompicones su clásica diagonal por la izquierda. Cruzó el balón con la zurda y, tras rebotar con Tarín, despistó a Cuéllar.
Con el partido decidido, siguió el monólogo azulgrana con el balón, también con la entrada de Junior, Rakitic y Arthur. Fue el brasileño el que cerró la goleada. Con el Leganés desordenado, Ansu lo probó primero, Messi tampoco acertó en el rechace y, desde el interior del área, el centrocampista marcó el cuarto tanto de la noche (4-0, al 77’).
Se quedó sin aire Ruibal en la mejor oportunidad del conjunto del Leganés de Javier Aguirre para marcar el gol del honor poco antes de que Messi, con un desmarque al espacio a pase de Rakitic, cerrara la goleada, sellara el pase a cuartos de final de su equipo y sumara su victoria número 500 vistiendo la zamarra azulgrana.