El Bayern Múnich se proclamó campeón de la Bundesliga por 30ª ocasión en su historia, y octava consecutiva, tras imponerse este martes al Werder Bremen por 1-0, conviertiéndose el campeonato alemán en el primero en decidirse tras la reanudación por la pandemia del nuevo coronavirus.
El club bávaro se impuso en Bremen gracias a un solitario gol del polaco Robert Lewandowski antes del descanso (43) y suma tres puntos que le colocan con una ventaja de 10 sobre el Borussia Dortmund, con sólo tres partidos por disputar.
El delantero polaco sumó su gol 31 en Bundesliga esta temporada en una bonita acción, parando con el pecho un pase de Jerome Boateng y rematando a la media vuelta de volea.
El Bayern acabó en inferioridad, por la expulsión en el minuto 79 del defensa canadiense Alphonso Davies por doble cartulina amarilla, pero con siete victorias en otros tantos partidos tras la reanudación del campeonato en mayo, nada parecía poder detener a los bávaros.
Con 76 puntos, el Borussia Dortmund, segundo con 66, ya no puede dar caza al líder, al quedarle sólo tres partidos por disputar (9 puntos), el primero de ellos el miércoles ante el Maguncia.
En este extraño fútbol en tiempos del COVID-19, el riguroso protocolo sanitario ha dejado la celebración por el título como si fuera una fiesta de un equipo junior. Sólo los suplentes y los miembros del cuerpo técnico sentados en el banquillo pudieron abrazar a los jugadores en la cancha.
Fiesta en tiempos de coronavirus
Las estrellas del Bayern hicieron la ola ante una tribuna... en la que solo estaban presentes seis directivos del club, entre ellos el director general Karl-Heinz Rummenigge y el presidente Herbert Haines, que respondieron con aplausos... manteniendo las distancias entre unos y otros.
"Evidentemente es una situación especial sin nuestros hichas, sin su energía, pero estamos muy felices por ser campeones otra vez", declaró Lewandowski.
Para el público, hizo falta que el canal Sky Alemania simulara con efectos digitales una lluvia de confetis para dar un todo festivo a la transmisión televisiva.
"Estamos felices por este título", declaró Rummenigge a Sky. "Hay que recordar que en otoño tuvimos hasta siete puntos de retraso. (El entrenador) Hansi Flick recuperó al equipo, le hizo jugar de manera atractiva y victoriosa (...) El sábado haremos una fiesta pequeña, sin las esposas desgraciadamente. El ambiente era extraño, con apenas una veintena de personas en las gradas, pero era la única manera de poder acabar esta Bundesliga", añadió respecto a la disputa de partidos a puerta cerrada.
Esta séptima victoria consecutiva desde la reanudación fue menos clara que las anteriores y el Werder Bremen, que lucha por no descender, tuvo ocasiones incluso para empatar, sobre todo a raíz de la expulsión de Davies, pero para la historia quedará el gol de Lewandowski que da un nuevo título al Bayern, que se mantiene en la carrera por lograr el triplete por segunda vez en su historia.
El 4 de julio disputará la final de la copa en Berlín ante el Bayer Leverkusen y se espera que en agosto siga su andadura en la 'Champions', donde tiene pie y medio en cuartos de final después de ganar 3-0 en Londres al Chelsea en febrero, antes del parón por el coronavirus.
"¿Si buscamos el triplete? Somos el Bayern Múnich. Los objetivos son los mismos cada año", declaró con orgullo el técnico Hansi Flick. "Hemos conseguido nuestro principal objetivo, el campeonato. El próximo paso será la final de Copa y después habrá la Liga de Campeones", añadió.
Con este título, Thomas Müller empata con 9 Bundesligas al francés Franck Ribery como los jugadores con más campeonatos de la historia.