Cuando el pequeño Jordan escucha que a su mamá se le quiebra la voz, voltea y le dice con una entereza inusual de un niño de su edad "no llores mami, todo va a estar bien"... ella recupera la postura y continuó con un relato que desde hace cinco años los atormenta.
Jordan Vadhir es un niño de 8 años que sueña un día jugar en el América, conocer a Memo Ochoa e igualar a Cristiano Ronaldo, Messi y al Chicharito Javier Hernández, sus ídolos desde que tiene uso de razón.
Es un niño inquieto, se le notó desde que llegó a las instalaciones de Diario de Xalapa, donde rápidamente se acomodó en un sillón, recostó su cabecita a rape mientras la señora María del Carmen García Ronzón, su mamá, nos contó lo que han sufrido durante casi cinco años que a su pequeño le detectaron leucemia.
Jordan Vadhir es uno de los siete chicos que viven en el poblado de Pacho Viejo y que padecen un mal similar, situación que mantiene unidos a ellos y a sus familias en una férrea lucha contra sus respectivos males.
El calvario de la familia Mendoza comenzó hace casi cinco años, dijo su mamá: “Jordan estaba jugando futbol fuera de nuestra casa y entró diciendo que le dolía la panza, pensé que le dio el dolor del caballo y le di un té, pero no se le quitó, tuve que llevarlo a un centro de salud y allí sólo me dieron antibiótico, un desparasitante y vitaminas, pero no mejoraba”.
En los días posteriores, detalló María del Carmen García, su hijo presentaba una protuberancia en un costado del estómago.
Lo llevamos a que le realizaran unos estudios y fue allí que le detectaron la enfermedad… fue un duro golpe para nosotros
Sus visitas a los nosocomios han sido constantes desde aquel día, pero él lo resume a su manera “hospital, cansancio, más hospital, comida que no me gusta y más hospital”.
Pese a todo, el alumno de la escuela primaria Manuel C. Tello de aquella población busca una escapada viendo a sus equipos favoritos, como a las Águilas del América, que por cierto fueron desplumadas por el Cuz Azul: “bueno, a veces se gana, a veces se pierde”, dijo.
Esos cinco goles que le anotaron a Memo Ochoa tampoco le importó, pues el arquero es su ídolo: “Chicharito, Messi y Cristiano Ronaldo y Memo Ochoa son mis héroes, por eso le voy a Barcelona, Real Madrid, Juventus y América”, comentó emocionado olvidando que su destino depende de un trasplante de médula.
También esto lo sabe y bromea porque la solución está en la médula ósea que no sea de alguien ligado a él sino de algún extranjero: “me gustaría que fuera de un ruso, un español o uno de París”, comentó mientras mostró una sonrisa que iluminó su rostro de niño un poco cansado por los muchos de los tratamientos a los que se ha sometido.
En un determinado momento Jordan Vadhir entendió la pregunta que le hicimos a su mamá sobre su situación, y la señora le cuestiona: “¿hay probabilidades que quedes bien o…? “que quede mal, que pueda morir”, respondió el pequeño sin titubear.
No cabe duda que el chico tiene una fortaleza tremenda, de hecho, él les demuestra a sus padres que es un roble que puede soportar cualquier vendaval: “Ha sido un guerrero que en los peores momentos se ha levantado, cuando prácticamente lo han desahuciado, él me dice que no llore más… me ha dado la fuerza que necesito”, sostuvo María del Carmen aguantando visiblemente muy dentro de su pecho el dolor de estar en esa situación.
La familia no se queda cruzada de brazos y hace de todo por recaudar fondos que lo ayuden a realizarle el esperado trasplante, aunque el costo es muy alto. “Hacemos rifas, vendemos antojitos, nos involucramos en carreras, vendemos lapiceros, de todo con tal degenerar algo para sus tratamientos”, concluyó.
Todo lo que pasa alrededor de Jordan Vadhir Mendoza García lo sabe muy bien. Entiende lo que padece y como un verdadero guerrero lo enfrenta, pero sin alterar sus ilusiones ni sus sueños, mostrando esa grandeza que lleva en su corazón y en ese espíritu indomable que Dios le dio.
APOYOS
La señora María del Carmen García Ronzón dijo que la gente que quiera ayudarlos pueden hacerlo a través de las cuentas bancarias 4766841279518891 de Banamex y 5579225091025216 de Scotiabank, o pueden comunicarse con ella al 2288533132.