América y Pumas se verán las caras mañana sábado en el estadio Azteca para un capítulo más de un partido que durante muchos años ha generado opiniones divididas con respecto a su naturaleza de Clásico, ya que mientras muchos defienden que el encuentro no alcanza estos niveles, otros afirman que sí lo es, incluso por encima de rivalidades como la que existe en el mismo Clásico Joven, el cual también engloba a dos equipos de la capital mexicana. En los años recientes, las encuestas han arrojado que en la Ciudad de México, América y Guadalajara son los más populares, pero contrario a lo que pasa a nivel nacional, Pumas ha rebasado en la capital a los cementeros e igualó a los Rojiblancos en cantidad de aficionados, lo que acrecienta la realidad de que sí es un Clásico el que disputan los de Coapa y los del Pedregal, pues los títulos ganados por los felinos le han hecho ganar adeptos, tal como el presidente de Consulta Mitofsky, Roy Campos, explicó en entrevista a ESTO.

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“Hay que recordar que a nivel nacional los llamados cuatro grandes por su número de aficionados, en el orden son: América, Guadalajara, Cruz Azul y Pumas, pero en la Ciudad de México cambian las cosas, en la capital América claramente también es el número uno y las Chivas también son el número dos, pero el número tres no es Cruz Azul, son los Pumas muy cerca de las Chivas. Cruz Azul pasa del tercer lugar nacional al cuarto en la CDMX y los Pumas se vuelven un Clásico casi equivalente al América contra Chivas a nivel Ciudad de México”, detalló.

“Los Pumas siempre atraen, tienen muchos positivos y pocos negativos. Representan a una universidad, a la juventud; dan oportunidades a chavos. Los Pumas siempre han representado una opción muy positiva al ser parte de una casa de estudios. Tienen una gran afición femenina, que a la mejor no es aficionada dura a los deportes, pero a la hora de decidir a quién le va, encuentran en los Pumas un equipo que las atrae románticamente. Tienen una gran afición entre la población joven. Son buena opción, porque son menos rechazados. Pumas tiene mayor afición femenina que América”, manifestó.

La contraparte de esto es la de los hinchas azulcremas. “Es muy interesante, porque América tiene una afición muy heredada, de mucha pasión en todos los estratos sociales.

‘Le voy a América porque mi papá le iba o mi familia le va al América’. Esto viene desde los 70’s y los 80’s con la influencia de la televisión. Es el controversial, su mercadotecnia es muy dada a generar esa pasión de que lo quieres o lo odias, a los que les gusta ese tipo de futbol pasional, de burlarse del vecino. Tiene una afición muy de grupo, no es una afición de romanticismo como se generó en los Pumas, que son los buenos de la película; si fuera así, los Pumas serían los héroes, la parte buena y América el villano. Hay también seguidores de los villanos, América atrae a los que les gusta burlarse de los demás”, apuntó.

Con base en esto, Roy Campos, quien se confesó aficionado de Cruz Azul, destacó que la rivalidad por excelencia en la capital mexicana es la que enfrenta a América con la Universidad. “Yo creo que sí (es el juego que divide a la CDMX). Lo digo desde una afición cementera, porque yo soy cruzazulino y quisiera decir que más bien fuera América contra Cruz Azul, pero en la capital yo creo que sí es el América contra Pumas. Es el que despierta más pasión y una rivalidad más de aficiones, más apasionada”, sentenció.

LAS AFICIONES LO VIBRAN

Históricamente, América y Cruz Azul entregaban un Clásico que se consideraba un tanto más regional, debido a la centralidad de ambas instituciones, las cuales han compartido incluso el estadio Azteca durante dos etapAmas diferentes; sin embargo, las aficiones con el correr del tiempo terminaron por encontrar una mayor rivalidad en el choque entre los de Coapa y los del Pedregal.

“Para mí el parteaguas donde cambian totalmente los juegos de América contra Pumas es debido a las finales que se jugaron entre los dos. Creo que la rivalidad aumentó demasiado, desde ahí se empezó a ver estos juegos de otra manera”, expuso Carlos Brasi, seguidor americanista.

La contraparte universitaria también dimensiona la animadversión con las Águilas.

“Para mí el América-Pumas es un Clásico. Es un partido que jugadores y aficionados marcan en el calendario desde que se anuncia. Es un juego muy pasional; un partido de mucha rivalidad, de ideologías diferentes en cuanto a aficiones y clubes”, expresó. De tal forma, este cotejo tiene todos los elementos para ser considerado un Clásico. La pasión está y aun- que esta vez las dos parcialidades más entregadas de la capital no acudirán al Coloso de Santa Úrsula, sin lugar a dudas estarán pendientes del que hoy es el duelo capitalino.