Líder, Cruz Azul selló la fase regular como el mejor del torneo y es ya un candidato al título, siempre lo fue.
Martín Cauteruccio y Pablo Aguilar fueron los héroes celestes en territorio purépecha. Caixinha guardó a varias piezas y no les afectó. Todos los vagones de la Máquina están ensamblados de la misma manera.
La Máquina luce aceitada, nada la detiene. Viene la Fiesta Grande y es tiempo de terminar la maldición.
Monarcas dejó ir la posibilidad de avanzar a la fase final, ahora tienen que rezar para que Pachuca y Gallos no ganen.
EL PARTIDO
Morelia supo su misión, atacar y ganar para no sacar las veladoras y depender de otros para lograr su pase a la fase final. El cuadro purépecha acechó de forma fugaz a la Máquina. El “Pipila” Vilchis y Miguel Sansores fueron los primeros en inquietar a la zaga celeste.
Cruz Azul, ya con su lugar asegurado en la Liguilla, fue más precavido. Caixinha se dio el lujo de no convocar a Chuy Corona, además de dejar en la banca al “Cata” Domínguez y al “Piojo” Alvarado, los tres recién desempacados de Argentina.
El portugués le otorgó minutos a Allison, Lichnovsky, Mena. Cruz Azul fue sólido, intenso, pero pocas veces llegaron al área rojiamarilla.
Monarcas apretó, peleó, Vegas a pase de Vilchis estuvo cerca de abrir el marcador; Sebastián cabeceó, el balón iba a la red, pero Allison reaccionó de espectacular manera para alejar el peligro.
Luego del susto, Cruz Azul apretó más, Morelia ya no avanzó tan fácil.
La batalla siguió con pocas acciones en las áreas. Los purépechas fueron más insistentes, pero la claridad no estuvo de su lado. Flores, Sansores y Ferreira buscaron mover la red sin éxito.
La Máquina carburó a medias, Mena y Elías lo intentaron por las bandas, pero pocas veces lograron cederle balones a Cauteruccio.
Tras varios minutos de intensidad, Morelia decidió tomar un respiro.
La batalla se tornó de muchos roces e imprecisiones, Monarcas lució más desesperado. La Liguilla se le iba.
El equipo de la fuerza recobró energía y antes de ir al vestidor volvió a atacar a Allison. El “Pipila”, Millar y Sansores corrieron de un lado a otro, varias veces entraron al área, pero no más. Ferreira intentó rematar todos los balones que tocó, sin embargo, la zaga cementera, no se lo permitió.
Sin moverse la red, el entretiempo llegó.