El Liverpool dio un paso adelante hacia los octavos de final de la Liga de Campeones con una victoria ante el Maribor, que no aguantó su planteamiento conservador y perdió 3-0 en Anfield con tantos del egipcio Mohamed Salah, del turco Emre Can y de Daniel Sturridge.
El equipo dirigido por Jürgen Klopp sumó tres puntos importantes para seguir adelante en la competición. El Liverpool, en el grupo del Sevilla, se asentó en el liderato y lo hizo tras un partido muy trabajado por el sistema montado por su rival.
El Maribor saltó al campo con mucho que ganar y con poco que perder. Necesitaba vencer para seguir en la pelea por uno de los dos puestos que dan el billete hacia la siguiente fase y saltó al campo con cinco defensas y una tela de araña con la que frenar al Liverpool.
Ese planteamiento tuvo éxito durante la primera parte, en la que provocó un atasco del Liverpool, incapaz de generar excesivas ocasiones. Aún así, el Maribor, un equipo claramente menor, pudo marcharse por detrás en el marcador después de los 45 minutos iniciales.
Primero pudo marcar con un remate de Roberto Firmino, que obligó al portero Handanovic a despejar un cabezazo al larguero y, justo antes del paso por los vestuarios, fue Emre Can quien lo intentó con otro cabezazo que se marchó por encima del larguero.
En la reanudación, el Liverpool cambió de marcha y el tanto de Salah en los primeros minutos acabó con cualquier opción del Maribor de conseguir la heroicidad de sumar en Anfield. El jugador egipcio marcó el gol de la noche con un remate de semi espuela tras un centro de Alexander-Arnold que finiquitó a su rival.
Después, tras un penalti fallado por James Milner, apareció Emre Can para, a falta de media hora, sentenciar un choque que estaba destinado a la victoria del Liverpool. El tanto final de Daniel Sturridge, en el minuto 90, cerró un marcador que acerca un poco más al cuadro inglés a los octavos de final.