Desde el beso no consentido que dio Luis Rubiales a Jenni Hermoso, han pasado ya casi tres semanas; sin embargo, el presidente suspendido, todavía está en el cargo y muchos se preguntan por qué no lo han destituido.
El todavía directivo de la Federación Española fue suspendido de su cargo por 90 días, tiempo en el que se realizarán investigaciones.
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Fue el viernes 25 de agosto, cuando Luis Rubiales en la asamblea de la RFEF, para sorpresa de todos, dio a conocer que no renunciaba. El directivo alegó que el beso con jenni había sido consentido y lucharía por demostrarlo.
Solo unas horas después del polémico discurso, la jugadora Jennifer Hermoso dio a conocer su postura. La campeona del Mundo con España aseguró que no era cierta la versión de Rubiales.
“No tolero que se ponga en duda mi palabra y mucho menos que se inventen palabras que no he dicho”, es lo que dijo la futbolista en un comunicado que sacó el sindicato de las jugadoras españolas.
Por otra parte, en sus redes sociales, dijo que no volvería a jugar con el equipo nacional de España hasta que Rubiales esté fuera del cargo, asimismo, sus compañeras se le sumaron en esta decisión.
Luis Rubiales fue suspendido
Luego de la postura oficial de Jenni Hermoso, los altos mandos de la FIFA tomaron acciones en contra del directivo. El máximo organismo dio a conocer que este quedaba suspendido de su cargo por 90 días. Durante este tiempo, queda relegado del cargo y dicho lapso servirá para tomar cartas en el asunto.
Se espera que antes de que se cumpla el plazo, el directivo quede fuera del cargo permanentemente. Además, se le podría sumar una sanción de inhabilitación por un tiempo por definirse. Es decir, no podrá ocupar un puesto similar en ninguna federación afiliada a la FIFA.
De momento, el cargo de presidente de la RFEF lo asumió Pedro Rocha, que estará como interino hasta nuevo aviso.
Los problemas que Rubiales ha dejado en España
Los problemas en la Federación de España siguen creciendo, pues luego del polémico acto y su defensa en la asamblea, han sucedido muchas cosas.
Lo primero fue que las seleccionadas se manifestaron a través de las redes sociales. Se expresaron indignadas por lo que había dicho Luis Rubiales e hicieron tendencia el #SeAcabó!
Luego de unas horas, el sindicato de las jugadoras españolas expresaron su renuncia al combinado mientras Rubiales estuviera en el puesto. La carta presentada fue firmada por las campeonas del mundo.
La situación se agravó cuando Jenni Hermoso dio su postura oficial sobre lo que había pasado. Además de desmentir dicho beso “consentido” como dijo Rubiales, decidió no representar más a su país, mientras él estuviera en el cargo.
Los problemas no se detuvieron y todo el cuerpo técnico se unió a este movimiento, salvo Jorge Vilda, en ese entonces entrenador del equipo.
El propio Vilda vio su despido el martes 05 de septiembre y solo unos minutos después, Montse Tomé, asumió el cargo.
La revolución en el futbol español comenzó y parece que pronto podría tener fin todo el problema que generó Luis Rubiales.
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