El uruguayo Luis Suárez volverá a jugar con su amigo Lionel Messi en la temporada 2024 de la liga MLS, luego de que el Inter Miami anunció oficialmente este viernes que contrató al atacante de 36 años.
Messi y Suárez compartieron delantera en el Barcelona entre 2014 y 2020 y junto al brasileño Neymar, que se marchó al PSG en julio de 2017, formaron la recordada MSN, una de las mejores delanteras de la historia del futbol.
"Estamos felices de darle la bienvenida a nuestro club al delantero de clase mundial Luis Suárez... que viene de una gran temporada en el futbol de Brasil. Será un jugador clave en nuestro plantel", dijo uno de los propietarios del Inter Miami, Jorge Mas.
El "Pistolero", máximo goleador histórico de la selección uruguaya (68 tantos) y tercero del Barcelona, con 198 tantos, se comprometió con el Inter para la temporada 2024, donde el equipo buscará su primer título de la MLS.
"Estoy muy contento y emocionado de asumir este nuevo reto con Inter Miami. Estoy impaciente por empezar y dispuesto a trabajar para hacer realidad el sueño de ganar más títulos con este gran club", dijo Suárez en el comunicado.
Vivirá su primera experiencia en la MLS tras despedirse este mes del Gremio, al que guió hasta el subcampeonato del último Brasileirao.
Suárez se pondrá a las órdenes del argentino Gerardo Martino y compartirá de nuevo vestuario con tres excompañeros del Barcelona: Messi y los españoles Sergio Busquets y Jordi Alba.
Para anunciar el fichaje, el Inter publicó en su cuenta de X (antes Twitter) una fotografía de cuatro niños sentados sobre el césped de espaldas y luciendo el uniforme rosa del equipo con los nombres de Suárez, Messi, Alba y Busquets.
"Nada más lindo que jugar con amigos", escribió el equipo acompañando la imagen.
Junto a todos ellos, Suárez ganó cuatro títulos de la liga española, cuatro de la Copa del Rey y una Champions League (en 2015) durante sus seis temporadas en el club azulgrana.
Soy optimista acerca de lo que podemos lograr juntos con nuestra ambición compartida
Suárez abandonó el Gremio un año antes de lo previsto alegando que el cargado calendario del futbol brasileño incidía en sus problemas físicos, especialmente en un dolor crónico en la rodilla derecha.
Incluso con sus molestias físicas, el ariete uruguayo anotó 29 dianas y repartió 17 asistencias en los 54 partidos de su única temporada en Gremio, al que comandó al subcampeonato del Brasileirao en su regreso a la primera división.