No había un sólo precedente. Cruz Azul encontró una nueva forma de atormentar a sus seguidores, volvió a las andadas, tuvo un partido catastrófico en Ciudad Universitaria y lo impensable e inaudito, ocurrió en 90 minutos. Todo en su contra. Los cementeros sufrieron la peor remontada de su historia. El famoso verbo "cruzazulear" volvió en el peor momento, un día antes de cumplir 23 años sin título, racha que durará, al menos, por seis meses más.
Nunca un equipo en la historia de los torneos cortos, que había sacado una ventaja en una eliminatoria de ida de cuatro goles, había sido eliminado. Hasta ayer, siempre había sido un trecho inalcanzable para los perdedores, pero La Máquina rompió con la estadística y fue descarrilada de la peor forma, sobre todo, paró su sueño de la novena estrella con un fuerte choque en el Pedregal.
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Los celestes habían ganado el partido de ida en el estadio Azteca. Luis Romo con un doblete, más tantos de Rafael Baca y Roberto Alvarado pusieron un cuarteto de anotaciones que, al menos de inicio, parecían suficientes, pero no fue así. En el estadio Olímpico, el goleador Juan Ignacio Dinenno en un par de ocasiones, Carlos González y Juan Pablo Vigón le dieron alcance al marcador global y por ser sublíderes del Guard1anes 2020 lograron acceder a otra final en su historia. Los celestes se quedaron fuera, en la lona, una vez más perdieron su ventaja y no es algo indiferente en la institución cementera.
Sin duda, ha sido la más terrorífica, pero a la mente se recuerdan varios episodios de tal magnitud.
La más recordada fue en la gran final del Clausura 2013. Los celestes estuvieron cerca de levantar el trofeo, llegaron con ventaja al Coloso de Santa Úrsula con gol de Chaco Giménez. En la vuelta aumentaron su ventaja con anotación de Teófilo Gutiérrez, pero en un par de minutos, en tiempo de compensación, fueron alcanzados por las Águilas. Aquivaldo Mosquera y un tanto acreditado al portero Moisés Muñoz empataron el duelo que se alargó a tiempos extras. En tanda de penaltis, América se impuso.
Otra de tantas ocurrió en el estadio Azul. La Máquina logró el 3-0 en 45 minutos en una edición más del Clásico Joven, con tantos de Christian Giménez y Francisco Silva, pero en el complemento, los pupilos de Nacho Ambriz le dieron la vuelta. Oribe Peralta, Pablo Aguilar y Silvio Romero en dos ocasiones lograron la histórica remontada a favor de los azulcremas y que sufrieron los de La Noria.
Las demás han sido ante Chivas en el Repechaje del Clausura 2003 cuando ganaron la ida 4-1 y la vuelta la perdieron por el mismo marcador en la Perla Tapatía, que los dejó sin oportunidades de Fiesta Grande.
Mientras que otra de las más recordadas ocurrió en la final del Apertura 2009. Cruz Azul se puso 3-1 en el partido de vuelta con anotaciones de Cristian Rivero y Emanuel Villa, pero en el complemento un doblete de Humberto Suazo y uno más de Sergio Santana le otorgó el triunfo a los Rayados, que en el estadio de los Insurgentes mantuvieron su ventaja y ganaron el título.
Ahora a los cementeros les volvió a ocurrir, mancharon su historia de nuevo y ya están eliminados del torneo.