Este martes se hizo oficial la llegada de Antonio “Pollo” Briseño a las Chivas, quien de inmediato dejó en claro que viene a ser campeón y llega al que considera como el equipo más grande de México.
“Llegar a este equipo, que es el más grande de México, es algo para mí que no puedo explicar con palabras”, dijo el zaguero campeón del mundo sub-17.
“Me veo campeón con el Guadalajara, así nos vemos todos, vengo con este reto y hambre de demostrar en lo personal y grupal que vamos a conseguir el objetivo, no se piensa en otra cosa que ser campeones”.
Para Briseño, esta es la oportunidad de consolidarse en el futbol, pues siente que está en un momento maduro en su carrera y quiere jugar, ser protagonista con el Rebaño, pensando en poder llegar a ser tomado en cuenta por la selección mexicana en algún momento.
“Siempre soñé con estar en un equipo tan grande como Chivas, porque juego con mexicanos. Cuando me plantearon la idea de venir, dije la competencia va a estar top, en todo mundo hay competencia, vamos a ganarnos nuestro lugar, voy a enfocarme aportar mi granito de arena, mi idea es jugar, vengo a tratar de dar ese salto de calidad en mi carrera, llegar a selección, vengo con ganas de ganarme mi lugar”.
“Si tengo que sudar sangre, voy a hacerlo por este equipo. Cada balón lo voy a pelear como si fuera el último, trataré de ser lo más profesional posible para que yo pueda rendir en el equipo, para que el aficionado esté contento. Al final pueden llegar o no los resultados, pero mi esfuerzo y dedicación por esta camiseta lo voy a dar”.
Finalmente, destacó el año que viene de vivir, pues se consolidó como titular en el club Feirense en la Liga de Portugal, lo cual lo llevó a llamar la atención de Chivas.
“Estoy ansioso, con unas ganas tremendas de ya entrenar, de estar en el equipo, aportar mi granito de arena. Tuve un año muy bueno en Europa, jugué 40 partidos, mi trabajo se vio reflejado en el sentido que Chivas se fijó en mi, estoy contento, con la ilusión intacta de estar en el futbol mexicano, ganarme un lugar”.
Briseño llegó como agente libre para firmar con el Guadalajara, toda vez que su contrato con el equipo luso expiró el primero de julio.