Con un drama inesperado, Monterrey tuvo que venir de atrás para remontar a Bravos de Juárez por 3-2 en el Estadio BBVA. Sergio Canales comandó la victoria en la guerra con los de la frontera. Que también dejó las bajas de Stefan Medina por lesión y de Germán Berterame por expulsión.
Rayados se lanzó al frente para abrir el marcador lo más pronto posible con Jesús Corona fue la pieza clave por la banda, pero a los desbordes del “Tecatito” siempre les faltó el toque final.
La millonaria plantilla llena de estrellas de los regios consiguió el objetivo, pero no fue gracias su alto juego en equipo. Sino por un error de la defensiva rival. Haret Ortega falló al pasar el balón a su portero con la cabeza y al querer recuperarse. Vázquez lo atropelló como un tren y, con mucha fortuna, de rebote el esférico terminó en Berterame, quien solamente lo empujó a las redes.
Todo parecía encaminarse para una victoria tranquila de la “Pandilla”, pero sorpresivamente los Bravos se mostraron más cómodos con el marcador en contra. Diego Valoyes falló un par de cabezazos y Jairo Torres advirtió con un riflazo.
Monterrey solamente buscaba terminar el primer tiempo, pero antes de lograrlo sufrieron la baja de Stefan Medina, quien se lesionó del tobillo en un mal movimiento.
Martín Demichelis dio ingreso a Lucas Ocampos para dar tranquilidad a la afición en su presentación en el BBVA. Pero más tardó en ingresar al campo el ex del Sevilla que en lo que cayó el empate de los Bravos.
En un tiro de esquina, Andrada intentó despejar el balón a primer poste con lo puños, pero Óscar Estupiñán le ganó el frente y empató el electrónico. El tanto picó el orgullo de los locales quienes se lanzaron al frente sin éxito. Y los Bravos encontraron recompensa con otro error en la salida que terminó con un remate de Valoyes en el área chica para conseguir la remontada.
Avilés Hurtado revivió al Gigante de Aceró cuando derribó a Edson Gutiérrez en el área. Y Sergio Canales convirtió el penal que le gritó en la cara la portero Benny Díaz. Pero el español tenía más. En los últimos minutos se convirtió en el salvador de los regios con un riflazo en el área que puso la voltereta.
Un cabezazo de Estupiñán casi apaga la fiesta, pero reventó el travesaño y devolvió el alma a los más de 36 mil aficionados en las gradas.
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El impulso de adrenalina llegó a tal nivel que, al tratar de recuperar un balón, Berterame barrió por detrás a Hurtado, de dobló el tobillo y se fue expulsado.
Monterrey aguantó como pudo los embates de los Bravos en los 10 minutos agregados. Y solamente la precipitación de los fronterizos consagró la segunda victoria de Martín Demichelis al frente de los regios.
Nota publicado en ESTO
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