Yeda, Arabia Saudita.- El Real Madrid se convirtió en el primer finalista de la Supercopa de España, al golear 3-1 al Valencia en el estadio Rey Abdullah, a orillas del mar Rojo.
No hubo noticias del vigente campeón de la Copa del Rey de España, superado desde el principio. Nada que ver con la función que ambos representaron tres semanas atrás, en la Liga española, con empate a un tanto.
El clásico español queda a deber, Barcelona y Real Madrid empatan sin goles
El cuadro que dirige Albert Celades sólo se dejó ver hasta el final, con el marcador imposible y por cuestión de orgullo. Antes, fue señalado por el Real Madrid, que mejora cada jornada, que cree en su capacidad y que aspira claramente al primer título de la temporada, por el que peleará el domingo frente al vencedor del duelo que hoy enfrentará al Barcelona con el Atlético Madrid.
Zinedine Zidane, técnico del Real Madrid, sorprendió en su cuadro titular con cinco volantes, que controlaron la posesión del balón sin que se notara las bajas de los delanteros Gareth Bale, Eden Hazard y Karim Benzema.
Raphael Varane avisó pronto con remate de cabeza que rechazó Jaume Doménech rechazó. Pero habría que esperar al cuarto de hora para que Toni Kroos sorprendiera al portero del Valencia.
Ante la sorpresa generalizada, el volante alemán cobró rápido un tiro de esquina que se coló en la portería rival, sin que Jaume pudiera hacer algo.
Con el gol a favor, Real Madrid mantuvo la presión sobre el Valencia, que no encontraba la forma de salir con el balón y conectar con Kevin Gameiro, muy solo al ataque.
Muy cómodo sobre el césped, el club merengue se relajó camino del descanso, sin que su rival aprovechara el momento para crear más peligro, y cuando parecía que los jugadores se retirarían al descanso con el 1-0 en el marcador, entonces apareció Isco Alarcón, quien aprovechó un rebote, a tiro de Luka Modric, para firmar el 2-0, en el minuto 39.
El dominio merengue se plasmó en el tercer tanto del encuentro, cuando Modric recibió un pase de Luka Jovic, en el área, donde hizo un amague ante dos rivales antes de pegarle al balón con el exterior del pie y prácticamente sentenciar el encuentro, en el minuto 65.
Valencia logró el gol de la honra mediante un penalti cobrado por Parejo.