El coronavirus paró el balón, silenció a los estadios y la televisión donde los aficionados miraban a Lionel Messi, del Barcelona, James Harden, de los Rockets de Houston, de la NBA, o las 500 millas, las carreras de más tradición en la Serie Nascar.
De entrada las pérdidas de la industria deportiva rondan 15 mil millones de dólares por parar el futbol y otros deportes para frenar la propagación del Covid-19 en Inglaterra, España, Alemania, Italia, Francia, México, Brasil, Argentina y Estados Unidos, revela Gerardo Molina, presidente de Euroamericas Sport Marketing.
“Una posible salida a esta crisis mundial es el regreso de los partidos a puerta cerradas con un protocolo común universal, si hubiera una leve mejora en el número de casos del coronavirus”, señala el consultor deportivo a El Sol de México.
Las ligas más importantes del futbol en el mundo no concluirán la temporada, dice el experto en mercado deportivos.
Por ahora, hay estadios vacíos, nadie vende boletos ni alimentos ni bebidas ni mercancía, así como cayó el valor de los derechos de transmisión de televisión, de los contratos de patrocinios y se pararon todas las apuestas deportivas y la logística para la ejecución de los partidos, explica.
“Este círculo vicioso que se genera alcanza ya a los jugadores, directores técnicos y su cuerpo de ayudantes, al personal empleado en las instituciones y empresas”, expone Gerardo Molina.
Lionel Messi, la estrella argentina del futbol, comunicó a través de sus redes sociales una rebaja de 70 por ciento del sueldo de todos los futbolistas del Barcelona durante la contingencia en España.
El Betis, donde juegan los mexicanos Andrés Guardado y Diego Lainez, reduce 15 por ciento el salario de sus jugadores.
En Italia, la Juventus ha decidido reducir el salario de su plantilla, en una acción que les ahorrará 90 millones de euros. En México, Pumas, Cruz Azul, Querétaro, Atlas y Santos ya pactó una reducción de los sueldos con sus futbolistas.
El futbol uruguayo está detenido desde el viernes 13 de marzo de 2020 por un exhorto del gobierno, quien prohibió las aglomeraciones, cuenta Michael Etulain, presidente de la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales.
Por un acuerdo entre el sindicato y la Asociación Uruguaya, todos los equipos de primera división dieron 10 días hábiles de licencia a sus futbolistas, así como siete clubes profesionales enviaron a los jugadores al seguro de desempleo.
Los futbolistas, quienes pagan como impuestos en Uruguay como cualquier contribuyente, tienen derecho a un seguro de desempleo pagado por el Estado.
Hoy reciben 50 por ciento del salario por parte del gobierno y el resto por los equipos de primera división, así como hay otros clubes que mantienen el salario de los futbolistas, dice el líder sindical.
Los futbolistas no tendrán una rebaja ni se verá afectado su salario, gracias al seguro del desempleo y los equipos de futbol donde trabaja, comenta Etulain.
Actualmente, la Mutual Uruguaya entrega una despensa de víveres y alimentos no perecederos para los futbolistas de tercera y segunda división, como ayuda para enfrentar la emergencia sanitaria.
En la segunda división profesional un futbolista cobra en promedio un salario mensual de 500 dólares, que no da para vivir en Uruguay, y con la emergencia decretada han sido los más afectados, comenta Michael Etulain.
Los clubes de la segunda división de Uruguay analizan enviar al seguro de desempleo a los futbolistas. Nueve de cada 10 en Argentina viven al día, ya que ganan 800 dólares al meses, dice Sergio Marchi, secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados.
El líder sindical aclara que no es legal recortar salarios o dejar de pagar a los cuatro mil futbolistas contratados en todas las categorías de futbol de Argentina.
Las empresas vinculadas al futbol tienen la obligación de seguir acompañándolo, porque regresará a generar riqueza y espectáculo y no desaparecerá como los dinosaurios, expuso.
“Le estamos pidiendo esa obligación moral de seguir acompañado y de seguir pagando, así como tengo certeza de que seguirán pagando”, añade Marchi.
El fútbol, uno de los deportes más populares del mundo, es la actividad más golpeada por la pandemia del coronavirus al quedar congelados todos sus ingresos, explica el CEO de Euroamericas Sport Marketing. Gerardo Molina estima que la Premier League inglesa reporta pérdidas de mil 800 millones de euros si no concluye la temporada de futbol, la Liga de España dejará de ganar mil 300 mil millones de euros y a la Bundesliga de Alemania ya no entrarán mil 200 millones de euros de ingresos. Todo eso pasará si continúa el balón parado y sin salir a las canchas.
La Serie A de Italia ya no generará ingresos por 800 millones de euros, así como en la Ligue 1 de Francia se les esfumarán 790 millones de euros en ingresos.
Las pérdidas por cancelación de la Liga MX llegan a 700 millones de dólares, siendo el torneo de futbol más afectado en América Latina. En Brasil ya se reportó una caída de 460 millones de dólares en ingresos y Argentina hay pérdidas por más de 325 millones de dólares.
Las afectaciones ya llegaron a las principales ligas deportivas de EU: la NBA es el primer damnificado y con pérdidas de mil 600 millones de dólares.
El béisbol tiene caída de ingresos de mil 500 millones, la NFL registra pérdidas por mil 400 millones de dólares, la NHL ha visto una disminución de mil 300 millones de dólares de sus ingresos, la Nascar reportó una baja mil 100 millones de dólares de sus ganancias y la MLS caerán en mil millones de dólares.
“La crisis por la que transita el mundo entero por la pandemia del Coronavirus ha dejado al deporte sin ser prioridad y lo puso en un segundo plano”, añade Molina.
Las competencias deportivas mundiales fueron suspendidas y se está a la espera de que “un milagro haga que la sociedad vuelva este año a la normalidad”.
“A este ritmo, en menos de 60 días llevará a la industria mundial a un crack financiero jamás visto en la historia, dejando secuelas muy profundas en el mundo del deporte, el que nunca será el mismo que hemos conocido”, concluye Molina.
