Después de tanto tiempo de espera, finalmente, las Grandes Ligas llegarán a la capital de nuestro país para disputar por primera vez una serie de temporada regular el próximo 18 y 19 de abril en el estadio Alfredo Harp Helú, la nueva casa de los Diablos Rojos del México.
La México Series la jugarán los Padres de San Diego y los Diamantes de Arizona, en un parque de pelota con capacidad para 20 mil aficionados, de los más modernos del continente, que fue inaugurado en marzo pasado por los Diablos ante un equipo de prospectos de los Padres.
Arizona fungirá como el local en ambos duelos, en una serie que originalmente se iba a disputar en el Chase Field, casa de los Diamantes.
Ambos conjuntos integran la División Oeste de la Liga Nacional y en la campaña pasada quedaron fuera de los playoffs, en un sector en el que clasificaron los Dodgers de Los Ángeles.
La Ciudad de México recibió juegos de pretemporada de Grandes Ligas en 2001, 2003, 2004 y 2016 en los estadios Fray Nano y Foro Sol.
En esa última edición, justo hace tres años, se enfrentaron en el estadio Fray Nano los Padres de San Diego y los Astros de Houston.
Alfredo Harp Helú es el dueño de los Diablos Rojas de México; también es propietario minoritario de los Padres.
“Nuestras conexiones con México son profundas, con Alfredo siendo copropietario de los Padres y nuestra base de fanáticos binacionales que se extiende hasta Baja California y en el país”, dijo el presidente de operaciones comerciales de los Padres, Erik Greupner.
“Estamos encantados de competir en la capital de México y mostrar a nuestros jugadores a escala mundial”, añadió.