Berlín, Alemania.- Los atletas del entrenador suspendido Alberto Salazar, tratados en el marco de un proyecto de entrenamiento de Nike, eran "animales de laboratorio" que ignoraban que les dopaban a sus espaldas, afirmó el director de la Agencia Antidopaje Estadounidense (USADA), Travis Tygart.
"Deben entender que los atletas no tenían ni idea de lo que les hacían, de lo que les daban. Ellos ignoraban las dosis, si estaba autorizado o prohibido", dijo Tygart en una entrevista este miércoles con la televisión alemana ZDF.
"Esto no concierne a ningún atleta actualmente en el Mundial de Doha", aseguró sin embargo el director de la USADA.
"Les mandaban a casa del médico y les decían que debían escucharle, confiar en él", añadió, preguntado por el escándalo provocado por la suspensión de Salazar, responsable del Nike Oregon Project (NOP), un programa de entrenamiento respaldado por la marca deportiva.
La firma estadounidense, con una cifra de negocio de 10 mil millones de dólares, respaldó a Salazar, suspendido cuatro años por la USADA por "organización e incitación a una conducta dopante prohibida".
Preguntado por la responsabilidad de Nike, Tygart fue claro: "Espero que Nike tome esto como una llamada de atención. Ya no tienen el derecho a encontrar excusas, deben admitir que se han realizado experimentos con atletas en su nombre y en su centro de entrenamiento, y que fue simplemente malo".
"Nike debería apoyar a estos deportistas", añadió, "indemnizarles y mostrarles que esta práctica de utilizar a los atletas como animales de laboratorio era mala, y no debe repetirse nunca más. Nike podría utilizar esto para mostrar (...) que apoyan un deporte realmente limpio".
Salazar, mundialmente conocido, "no dio ninguna opción a sus deportistas de rechazar medicamentos o métodos prohibidos que él o su médico Jeffrey Brown les prescribían", continuó Tygart.
Salazar probó la testosterona en sus propios hijos
"Alberto Salazar realizó experimentos con testosterona que son ilegales", detalló Tygart. "Probó la testosterona sin prescripción médica en sus propios hijos, y consideró esto como un experimento científico, por lo que llevó a cabo un informe".
"Lo realizó en secreto, para ver si podía sortear las reglas antidopaje (...). Quería ver qué cantidad de gel de testosterona podía poner en la piel de una persona sin sobrepasar el umbral y desencadenar un control antidopaje positivo. Eso se extrae de correos electrónicos entre Alberto Salazar, el doctor Brown y altos cargos del proyecto Nike".
La testosterona no es el único producto involucrado, ya que Salazar probó "otros productos dopantes peligrosos".
"Una deportista escuchó decir incluso que debía tomar medicamentos contra un mioma (tumor benigno en el útero) cuando ella no tenía un mioma. Mintieron a los deportistas y continuaron sus experimentos científicos con ellos en el NOP", acusó Tygart.
De acuerdo con Tygart, 10 atletas asociados al NOP entre 2010 y 2014 se dirigieron espontáneamente a la agencia. "Los deportistas vinieron a vernos y nos dijeron 'no sabemos si está autorizado, ¿pueden investigar y verificar?'".
"Todos han puesto a nuestra disposición sus datos médicos. Hemos descubierto que eran falsificados, que se habían añadido falsas informaciones, luego de que los pidiéramos oficialmente (...) Todo el entorno del NOP intentó esconderlo todo, no era ni transparente ni abierto", concluyó el director de la USADA.
Preguntado este miércoles por el tema, el presidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), Sebastian Coe, aseguró que el caso Salazar "no hace descarrilar el Mundial. Es quizás un problema para la prensa, pero en realidad no es un gran tema para la mayor parte de la gente que sigue el Mundial", dijo.