Tener un perro como compañero de vida es una invaluable responsabilidad que ha migrado de designarle una labor única para defender tu patrimonio hacia ser tu compañero de vida en quien confías cada secreto de tu vida.
En México existen 22 millones de perros y 5.5 millones de gatos en alrededor del 54 por ciento de los hogares. De este panorama, el 80 por ciento de los dueños considera a su mascota como un miembro de su familia, según datos de Mars Pet Care Ownership Survey.
Esto se debe a que los dueños han adquirido más responsabilidad con los animales y tienen más conciencia del cuidado de ellos además de que las familias que desean un animal de compañía tienen en mente que, un perro por ejemplo, formará parte importante de su vida pues buscan un apoyo emocional y social más allá de las labores de vigilancia.
“Una parte importante que tiene que ver con las nuevas generaciones que prefiere no tener hijos y la ajetreada vida laboral que llevamos en la ciudades, por ejemplo. Esto provoca que la gente tenga una mascota más fácilmente y que se cree un lazo sentimental muy fuerte, eso ayuda a que las mascotas se unan a la familia”, opinó Ricardo Monterrubio, Director Asociado de Marketing de la Unidad de Animales de Compañía en MSD Salud Animal México.
Sin embargo, cuando el perro obtiene este status en la manada humana, también implica que el dueño se comprometa con el cuidado correcto y la atención necesaria para una convivencia plena. El gasto promedio que invierte un dueño en la manutención de una mascota, desde alimento, medicina preventiva, divertimento, accesorios, por ejemplo para un perro de talla mediana, es de aproximadamente 10 mil pesos al año.
Si bien han pasado del patio de la casa a las camas de cuartos, es necesario no sólo criarlos, sino educarlos para que realicen sus necesidades sin que rompan con las reglas de la casa. Las escuelas para perros pueden ayudar, aunque son más para los humanos que para los animales, ya que se les enseña que las mascotas aprenden por imitación, por repetición y con premios.
Para conocer más acerca de la educación canina, asistimos a una clase realizada en Los Dinamos, en la Ciudad de México. El guía confirmó que el tono de voz es importante ya que los animales sabrán que con el imperativo se les da una orden, con el enérgico es que se les indica qué no hacer, y el de premio, cuando conocen que han realizado bien una orden.
A las mascotas no sólo se les premia con comida, o con un "¡bien, ese es mi campeón!” y una caricia, el paseo diario es importante y qué decir de una salida en manada. Los grupos de entrenamiento canino suelen llevarse a los dueños y sus mascotas al campo, aquí primero se hace trabajo de socialización entre los animales, después una larga caminata sin correa para luego meterse a jugar un rato en los ríos.
Ya cansados todos, viene un poco de yoga. El amor y las caricias son la comunicación y respuesta no sólo para el perro que cuida la casa, sino al fiel compañero que da siempre lo mejor de sí.
Además, la forma de alimentación de los perros también ha cambiado. Jorge Martínez, Brand manager de Pedigree México, recordó que esta necesidad se ha transformado conforme los hábitos de las generaciones que cuidan de un perro.
Afirmó que existe un incremento en el uso de alimento procesado, especialmente por productos secos y que las familias convencionales son aquellas que suelen dar comida fresca a sus mascotas, mientras que las generaciones más jóvenes procuran la comida húmeda.
Al entrenamiento y alimento se suman los ciudados de la salud. La encuesta de Mars Petcare señala que la población de perros crece más rápido que la población de humanos, que es de 2.5 por ciento contra 1.8 por ciento. De ahí la importancia de ser conscientes del cuidado responsable de animales para evitar la sobrepoblación y los problemas esterilizar.
Tener un perro como compañero de vida y leal amigo, trae sin duda grandes beneficios, reducen el estrés, bajan la presión arterial y reducen el aislamiento social pero al final, nos motivan a ser mejores personas.
CÓMO CUIDAR DE TU PERRO
Cuida su salud: Es importante que tengas su carnet de vacunación y desparasitación al día. En caso de que le falte alguna vacuna, no lo expongas ni a él ni a los demás y déjalo en casa hasta que te pongas al corriente.
Conoce el carácter de tu perro: Identifica si es extrovertido, activo o prefiere estar en casa para saber qué lugares puede disfrutar.
Establece hábitos: Este paso es elemental y clave, ya que es la rutina a la que se acostumbrará día a día, lo ideal es que tu mascota se adapte a tus horarios
Cuida su actividad física: Sácalo a pasear al menos 2 veces al día en horarios específicos, de preferencia con 30 minutos de duración cada uno, te ayudará a reforzar la parte de crearle hábitos, pero mucho más a su salud física y mental. Los paseos le ayudarán a controlar su energía, estrés o ansiedad, así como a incentivar su capacidad de relacionarse con otras mascotas y personas.
Contempla una buena alimentación: Es importante que desde temprana edad le proporciones el alimento adecuado a su edad, tamaño y estilo de vida. Es importante que lo acostumbres a dividir su ración diaria en 2 momentos del día, mañana y noche para adultos y 3 momentos del día en el caso de los cachorros.
Mantenlo ocupado aun cuando no estés en casa: Cómprale algunos juguetes que lo mantengan entretenido, así evitarás que se estrese esperando tu regreso.