La frase “una lloradita y a dormir” se ha vuelto popular en redes sociales. Sin embargo, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informa que esta actividad tiene más beneficios de los esperados, incluso recomienda llorar antes de trabajar por el “cóctel de neurotransmisores” que genera.
De acuerdo con la UNAM, cuando una persona llora logra que su flujo sanguíneo aumente en el cerebro, junto con la frecuencia cardíaca y el gasto energético, lo que equivale a correr hasta 5 kilómetros.
Sumado a ello, el llorar también activa componentes del cuerpo que traen beneficios al estado de ánimo.
¿Cuáles son los beneficios de llorar?
La UNAM asegura que después de llorar aproximadamente 15 minutos el cerebro libera endorfinas, las cuales son una sustancia neurotransmisora que tranquiliza. Además, genera orexinas, las cuales están relacionadas con el apetito.
También, el llorar ayuda a crear vínculos más fuertes y comprender a los demás, debido a que el ver llorar a otra persona activa las neuronas espejo e incrementa la oxitocina, hormona que aumenta el sentido de la empatía.
Sumado a ello, el investigador del Instituto Nacional de Psiquiatría, Eduardo Calixto, asegura que el llorar tranquiliza a las personas cuando están tristes, por lo que si esto no existiera, “tendríamos, tal vez, que correr cuatro o cinco kilómetros para tranquilizarnos”.
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En adolescentes, el llanto ayuda a liberar el estrés, por lo que los jóvenes que no practican esta actividad tienen a ser más agresivos y tener trastornos de personalidad.
¿Para qué sirven las lágrimas?
Además de ayudar a liberar la tristeza, las lágrimas sirven para indicar si una persona está hidratada, y ayudan a disminuir la probabilidad de infecciones en el ojo, debido a que tienen mucina, bicarbonato e inmunoglobulina A, componentes que ayudan a controlar la actividad bacteriana.
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A nivel hormonal, se establece que las mujeres lloran más que los hombres, debido a que estos tienen altos niveles de testosterona, pero conforme disminuyen a lo largo de la vida, es común que los hombres lloren con mayor frecuencia.