Muchas de las capacidades que tienen los animales son envidiables y el humano constantemente busca replicarlas en artefactos que puedan ser de ayuda para sus actividades y en esta ocasión, científicos lograron un nuevo invento.
Virginia Tech desarrolló el octoguante, una especie de manopla inspirada en el tentáculo de los pulpos, el cual será de gran apoyo para diversos investigadores que se especializan en actividades bajo el mar y aquí explicamos cómo funciona.
Puedes leer también: Puntos de Lagrange, el fenómeno que permite el funcionamiento del telescopio James Webb
Michael Bartlett, profesor asistente en el departamento de ingeniería mecánica, explicó que la facilidad con la que esta especie se adhiere a materiales de su alrededor fue una inspiración para ellos.
Cuando algún científico intenta tomar un objeto que se encuentra bajo el agua, es complicado tomarlo con el cuidado suficiente para que no se caiga y se dañe y las manos humanas no son tan ágiles.
En cambio las ventosas que tienen los tentáculos son el punto clave de la investigación, pues con 200 de ellas en las extremidades del pulpo es como logra su capacidad de adhesión, detección y control para manipular objetos bajo el agua.
¿Cómo funciona el octoguante?
Los científicos diseñaron el guante con tallos de goma que se activan al detectar un objeto al realizar una pequeña presión al contacto y es capaz de adherirse a superficies planas y curvas.
Para lograr esta tecnología recibieron la ayuda del profesor asistente Eric Markvicka de la Universidad de Nebraska-Lincoln, quien implementó sensores ópticos de proximidad micro-LIDAR que detectan la distancia a un objeto.
Además, para hacerlo sentir natural al contacto con la piel humana se fabricó con diferentes tamaños y formas, logrando que la persona simplemente estire la mano y el artefacto hará el trabajo sin dificultades.
Este avance será de gran ayuda para buzos de rescate, arqueólogos submarinos y equipos de salvamento que constantemente sujetan personas o artefactos que están bajo el agua.