Con el desarrollo de la neurociencia los científicos han logrado avanzar a pasos agigantados en la comprensión de un órgano tan importante como lo es el cerebro. Además, esta ciencia podría ser clave para que los humanos incorporen tecnologías creadas artificialmente y así restaurar o crear células que se van deteriorando, tal es el caso de las neuronas.
En un nuevo experimento ideado por un grupo de científicos de diversas nacionalidades ha conseguido simular las funciones neuronales. Este proyecto ha dado esperanzas para crear tecnologías que permitan componentes del cerebro que puedan estar deteriorados o amplificar las funciones del mismo.
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Un avance implantes orgánicos
El experimento desarrollado en Suecia consistió en crear un circuito hecho de material orgánico que pudiera simular una conexión neuronal y funcionar correctamente.
La neurona artificial fue aplicada en una planta carnívora a la que el dispositivo envió señales y de una manera certera, la planta cerró su mecanismo para capturar insectos. Esto fue considerado como un logro ya que el circuito logró emular con precisión las funciones de una neurona.
“Potencialmente nos permitirá construir los componentes básicos de nuestro cerebro: neuronas y sinapsis”, dice Simone Fabiano, uno de los autores del artículo, publicado en Nature Communications .
“Las plantas carnívoras son fáciles de manejar y fueron una elección fácil para una demostración inicial. Sin embargo, la posibilidad de modificar la electrofisiología de los sistemas vivos a través de neuronas artificiales podría expandirse a otros sistemas biológicos, y estamos investigando eso con modelos animales”, agregó el científico.
¿Qué significa esto? Los expertos consideran que la neurociencia aplicada la creación de células podría iniciar una nueva era en la que se fabricarían implantes para los humanos e incluso hizo pensar sobre una posible conexión directa del cerebro hacia Internet o entrenar este órgano para realizar la cantidad de procesos que hace una computadora.
“Estamos intentando imitar lo que hacen los circuitos del cerebro y del sistema nervioso. Pero tienen que ir paso a paso, porque no sabemos exactamente cómo funcionan. Si logras algo que se pueda reproducir, una pequeña función como en este caso, es un avance importante: es lograr una biocompatibilidad más cercana a lo que es una célula biológica”, dijo Javier DeFelipe, neurólogo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
¿Cómo funciona el circuito?
El dispositivo está basado en componentes orgánicos capaces de transportar iones y electrones y así se transmiten impulsos que simulan el trabajo de las neuronas. Además el circuito como está fabricado de materiales orgánicos podría imprimirse sobre plástico o papel e imprimirse con materiales de serigrafía baratos.
“Esto sería inconcebible con la electrónica basada en silicio”, reitera Fabiano. Y es que el silicio, material presente en los componentes de las computadoras, es más difícil de integrar en los organismos biológicos.
“Los componentes básicos de nuestras neuronas artificiales permiten la fusión sensorial directa entre las neuronas. Esto nos permitirá desarrollar sistemas que puedan sentir, procesar y actuar, y así introducir el proceso de toma de decisiones en los dispositivos”.
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“Esto podría usarse para monitorear la salud, en interfaces cerebro-máquina y en robótica”, dice Fabiano quien asegura también que aún falta mucho para esto pero que en un futuro será posible la creación de neuronas artificiales.
