El 16 de junio de 1963, hace 60 años, Valentina Tereshkova se convirtió en la primera mujer en volar al espacio. Y desde entonces lo han hecho 83 mujeres.
Los primeros años de Valentina
El 6 de marzo de 1937 en Maslennikovo, oblast de Yaroslavl, a 250 kilómetros al noroeste de Moscú, nació Valentina Vladímirovna Tereshkova, en el seno de una familia campesina emigrada desde Belarus.
Su infancia fue triste y devastada. En 1939 su padre, un operador de tractores, murió en la Guerra de Invierno (1939-1940). Dos años después, el 6 de junio de 1941, cuando Valentina tenía 4 años, poco menos de 4 millones de soldados nazis invadieron la Unión Soviética. Ellos no acostumbraban tomar prisioneros, por lo que aldeas enteras fueron arrasadas, en el feroz y rápido avance de la Wehrmacht. En total, cerca de 30 millones de soviéticos murieron, siendo más del 50 por ciento civiles.
En el mismo año de la alegre victoria soviética, 1945, Valentina se inscribió en la escuela No.32, graduándose en 1953. Después trabajó en la fabrica de neumáticos de Yaroslavl mientras estudiaba en la escuela vespertina. Entre 1955 y 1960 trabajó en una fábrica textil y estudió ingeniería. En 1959 se inscribió al club de paracaidismo de Yaroslavl, acumulando 90 saltos.
Mientras tanto, la era espacial había iniciado, en 1957 voló el Sputnik, el primer satélite artificial de la Tierra, el 12 de abril de 1961 Yuri Gagarin se convirtió en el primer ser humano en viajar al espacio.
Serguei Koroliov, el comandante en jefe, tenía claro que pronto debía volar una mujer al espacio. Meses después (1962) se lanzó la convocatoria para mujeres cosmonautas. La Unión Soviética vivía una euforia de los viajes espaciales. El criterio era simple, se buscaban mujeres de no más de 1.70 m. de estatura, con no más de 70 kg de peso, menor de 30 años y paracaidista.
Cientos de chicas abarrotaron el centro de inscripción. Después de varias pruebas, quedaron cinco: Janna Yurkina, Tatiana Kuznietzova, Valentina Ponomariova, Irina Soloviova y Valentina Tereshkova.
Las jóvenes se entrenaron durante meses. Simulaban la ingravidez en un avión que se dejaba caer por unos segundos. Para entonces, la cosmonáutica soviética daba grandes avances, llegó el momento del primer vuelo simultaneo de dos naves espaciales, estableciendo comunicación par radio.
EL VUELO ESPACIAL
Hace 60 años, el 14 de junio de 1963 despegó la Vostok 5, pilotada por Valery Bikovsky, dos días después, el 16 de junio despegó la Vostok 6, pilotada por Valentina Tereshkova. En los 8 minutos que dura el viaje al espacio, Valentina demostró que las mujeres podían ser tripulantes espaciales y traspasar las fronteras de la atmósfera terrestre.
La misión consistió en: comparar los efectos de la ingravidez en el organismo masculino y femenino. Establecer comunicación por radio entre dos naves en órbita. Integrar el sistema médico-biológico. Observar y fotografiar la Tierra.
Además, en esta misión se revolvió la alimentación de los cosmonautas y se confeccionó un traje especial para el cuerpo femenino. En la órbita terrestre, las Vostok 5 y 6 se aproximaron a 5 km de distancia y establecieron contacto por radio.
A Valentina le sorprendió saber que con tantas estrellas como nunca había visto, confundió varias de ellas. Algo normal que le sucede a los astrónomos en las primeras observaciones.
El 19 de junio, tras 2 días, 22 horas y 50 minutos de vuelo espacial, la Vostok 6 reentró en la atmósfera terrestre. Le siguió la Vostok 5 tres horas y media después. Bikovsky mantiene el récord del vuelo espacial en solitario más largo, 4 días y 23 horas. Después vinieron los vuelos con dos y tres cosmonautas.
Siendo las primeras naves espaciales, las Vosnok no estaban diseñadas para el aterrizaje tripulado. Por ello, en pleno descenso los cosmonautas saltaban de la nave y aterrizaban en paracaídas.
Apenas tocó suelo Valentina Tereshkova, se escribió la primera página de las mujeres en el espacio. A pesar del éxito de la misión, al parecer falló la comunicación con el Centro de Control. Se especuló que Tereshkova no se comunicaba y por lo tanto no se le permitió tomar el control de la nave, que se mantuvo siempre automática.
Sin embargo, en su informe, ella menciona que todo ocurrió sin incidentes, que tuvo comunicación con la Tierra. Mientras que con la Vostok 5 tuvo comunicación el primer día pero se perdió y ya no se recuperó. Dijo que las comunicaciones empeoraban en las regiones ecuatoriales. Mencionó que tuvo un dolor en la espinilla derecha. Además, en la órbita 45 tomó el control de la nave y maniobró para aterrizar en las estepas de Kazajstán.
Valentina fue condecorada con la Orden de Héroe de la Unión Soviética, obturo el rango de General de División de la Fuerza Aérea. Entrenó a mujeres cosmonautas. Desempeñó varios cargos políticos y en 2011 fue diputada por el Partido Rusia Unida. Se casó con el cosmonauta Andrian Nikoláyev (Vostok 3). Su hija Elena es la primera persona del mundo que nace de dos viajeros espaciales. Valentina cumplió 87 años el pasado 6 de marzo.
Pasaron 19 años para el regreso de una mujer al espacio. En 1982 voló Svetlana Savítskaya, quien en su segundo vuelo en 1984, se convirtió en la primera mujer en realizar una caminata espacial. Un año antes, el 18 de junio de 1983, hace 40 años, Sally Ride se convirtió en la primera astronauta de Estados Unidos, lo que realizó abordo del Transbordador Challenger.
Hasta el 11 de junio pasado, han volado 652 personas al espacio, siendo 83 mujeres. El 4 de junio de 2022 voló la mexicana Katya Echazarreta, en un vuelo suborbital de Blue Origin de 10 minutos de duración. german@astropuebla.org