En el sur de China un grupo de investigadores descubrió un bosque en la profundidad de una cueva que podría guardar nuevas especies de plantas y animales.
Científicos del Instituto de Geología Karst del Servicio Geológico de ese país encontró este paraíso de la naturaleza en la región de Guangxi Zhuang, que es conocida por sus formaciones rocosas kársticas.
En las zonas con topografía kárstica es común la formación de sumideros o cavernas que pueden albergar cenotes o ecosistemas con vegetación exótica, según la Sociedad Mexicana de Exploraciones Subterráneas.
¿Qué es y cómo se formó el Pozo celestial de China?
El descubrimiento del Pozo celestial de China se originó en 2022; George Veni, director ejecutivo del Instituto Nacional de Investigación de Cuevas y Karst (NCKRI) de Estados Unidos, dijo para la revista Live Cience, que los sumideros se forman por la disolución de un lecho rocoso.
Gracias a la lluvia se ensanchan las grietas en el suelo y con el paso del tiempo, se vuelven túneles profundos.
Las cuevas son tan grandes, que se convierten en espacios óptimos para el nacimiento de bosques tupidos.
El especialista indicó que no sería raro que este lugar albergue fauna y flora que aún no son identificadas.
“No me sorprendería que hay especies encontradas en estas cuevas que nunca han sido reportadas o descritas por la ciencia hasta ahora”, expresó Venti.
El “tiankeng” como se le nombra en chino al pozo celestial, tiene 192 metros de profundidad, 306 metros de largo, 150 metros de ancho y su volumen supera los cinco millones de metros cúbicos, además, tiene tres entradas diferentes; en su interior hay árboles de hasta 40 metros de altura, que buscan con su ramas la luz solar de la superfiice, según la agencia Xinhua.