Son fundamentales para la continuidad de la vida en el planeta. Se trata de las abejas, colibríes, avispas, abejorros y mariposas, entre otros, que son polinizadores esenciales para la producción del 35% de los cultivos que se consumen en el mundo.
En el caso de México, se estima que de las 236 plantas cultivadas que se utilizan como comestibles se consumen los frutos o semillas de 171, de las que el 85% depende de los polinizadores.
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Por su relevancia y amplios beneficios a la agricultura, desde el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) se impulsan prácticas como el manejo agroecológico de plagas y la diversificación de los cultivos, principalmente con los cultivos que presentan floración, como diversas leguminosas y algunas oleaginosas, ya que se estima que el 90% de las flores necesitan polinización.
En el marco de la estrategia Mesas Técnica Agroclimáticas, respecto a la actividad apícola de Yucatán, se detalla:
De aproximadamente 20 mil especies de abejas que existen en el mundo, más del 85% son solitarias. No viven en colmenas. Esto es, solo pocas especies producen miel.
Las abejas melíferas solo constituyen 9 especies en total y de éstas, la abeja europea Apis Mellifera es la más extendida en la apicultura: crianza y cuidado de las abejas para obtener miel, jalea real, propolio, cera y polen.
También recuerda que en América no existían abejas del género Apis. Las civilizaciones mesoamericanas cultivaron diversas variedades de los géneros Trigona y Mellipona, entre las que destaca la abeja melipona o abeja maya (Melipona beecheii), que aún se trabaja en Yucatán de acuerdo a la tradición de la meliponicultura de la que los mayas alcanzaron un grado de complejidad único.
La producción de miel es solo uno de los grandes beneficios de las abejas. El menos visible pero muy probablemente el más importante, es la polinización, que es la transferencia de granos de polen de la parte masculina de una flor, que es la antera, a la parte femenina: estigma, de otra o de la misma flor.
Este proceso sí lo realizan todas las especies de abejas. Y las abejas nativas, tienen un papel muy relevante.
Se informa que por su importancia económica e invaluables servicios ecosistémicos, las abejas y otros polinizadores son organismos esenciales.
Y sobre los riesgos y peligros que enfrentan, se dice que los monocultivos y el uso inadecuado y excesivo de insecticidas afectan a estas especies.
En cambio, los cultivos diversificados y los enfoques agroecológicos benefician sus poblaciones.
Justo en esta Mesa Técnica Agroclimática Apícola de Yucatán participaron especialistas de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Así como el gobierno del estado de Yucatán: el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap).
Junto con la Universidad Autónoma de Yucatán (AUDY), el Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) y el Centro Internacional de Mejoramiento del Maíz y Trigo (CIMMYT).
Se informa que en el presente mes de mayo, aumentó considerablemente el régimen de lluvias en gran parte de todas las regiones de interés para la apicultura. Y debido a las variaciones de temperatura, humedad, lluvias y frecuencia de frentes fríos y “nortes”, algunas especies productoras de néctar adelantarán o atrasarán su floración, esto es, tendrá un desfase la floración.
Y ante la presencia de floraciones y de los flujos de néctar y polen en el campo, no es necesario, durante este trimestre proporcionar alimentación artificial a las colonias de abejas basados en jarabes de azúcar y suplementos o sustitutos de néctar.
Pero enfatiza que sí es importante preservar y conservar los parches de monte alrededor de los apiarios y evitar la eliminación de especies vegetales en floración alrededor de cultivos agrícolas y carreteras, ya que son fuentes de néctar y polen para las abejas.