La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que está en curso una investigación interinstitucional sobre los 31 manatíes muertos desde el pasado 18 de mayo en el suroriental estado mexicano de Tabasco.
El comité para la atención de la contingencia por mortandad de manatíes en cuerpos de agua de Tabasco atiende todos los reportes de los pescadores de la zona sobre manatíes muertos, destacó la entidad ambiental en un comunicado.
Destacó la participación de autoridades federales, locales, instituciones educativas y organismos sociales en los grupos que participan en las investigaciones.
El organismo señaló que se cuenta con reportes de mortandades masivas de sirénidos en diferentes partes del mundo en los últimos 10 años, entre ellos uno en Florida, Estados Unidos, "por el afloramiento en la zona marina de algas nocivas o mareas rojas.
Según un estudio del Instituto Tecnológico de Boca del Río del oriental estado mexicano de Veracruz, en los cuerpos de agua del estado de Tabasco se ha detectado la presencia de metales pesados, una de los posibles causas de muerte a considerar.
El manatíe (Trichechus manatus) es una especie catalogada en peligro de extinción en consideración de que sus áreas de distribución o el tamaño de sus poblaciones en el territorio nacional han disminuido drásticamente, poniendo en riesgo su viabilidad biológica en todo su hábitat natural.