Una nueva tendencia en regalos está apoderándose de Japón, se trata de regalar flores artificiales en grandes bloques de hielo. Tal es la popularidad que durante el verano se dispararon las ventas de la empresa que comenzó con esta idea.
La empresa Onoda Shoten se dio a conocer con esta extraña idea, pero ¿de dónde surgió la propuesta?
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Arreglos florales congelados
La florería que se ubica Tokyo, centro de la nación del sol naciente, nació con una peculiar idea de arreglos combinados con hielo, no obstante, luego de la pandemia de covid-19, decidió imaginar otras formas de vender sus productos.
Fue así que comenzó a hacer exhibiciones de flores congeladas y sobre hielo, con tintes más artísticos, para que la gente comenzara a acercarse a sus productos y realzar las ventas.
Wataru Onoda, dueño de la tienda, dijo que primero se llena un gran recipiente con agua de la llave, después se colocan las flores y demás objetos decorativos, posteriormente es congelada. Luego de varios días el hielo se derrite pero queda una hermosa flor decorativa.
“El agua que usamos es agua del grifo, pero la congelamos durante mucho tiempo, durante un período de unas dos semanas. Al congelar el agua lentamente, se vuelve transparente, por lo que esta congelación lenta del agua hace que los objetos del interior se vean hermosos. Finalmente, lo cortamos, empacamos y lo entregamos a los clientes”, dijo Onoda para Reuters.
Los regalos son pensados para dar en el Día de las Madres, cumpleaños y aniversarios.
“Empezamos activamente a hacer esta exhibición de hielo desde el año pasado. El coronavirus se estaba propagando desde hace tres años y el hielo para consumo no se vendía nada. Así que nos esforzamos en pensar en cómo podríamos hacer que la gente disfrutara del hielo de una manera diferente y cómo podría usarse de manera diferente por el bien de nuestra empresa y de los consumidores”, agregó.
Los precios de estas flores van de los 6 mil 600 a los 11 mil yenes, unos 45 a 75 dólares respectivamente.
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“La pandemia fue un momento muy difícil y el suministro se había detenido y nos preguntamos qué pasaría si las cosas seguían así. Así que es increíble cuánta demanda de hielo ha regresado. Francamente, estamos en una situación en la que simplemente no podemos hacer lo suficiente”, concluyó Onoda.