Se cree que los gatos son enemigos del agua, o al menos, muchos felinos no disfrutan mojarse. Sin embargo, existe un extraño espécimen que es reconocido por ser un gato semiacuático.
El gato de cabeza de plana es originario de Asia, su hábitat se encuentra entre los bosques tropicales de Malasia, y son unos expertos nadadores y con una gran capacidad para pescar.
Una problemática que viven estos felinos es que actualmente se desconoce cuántos quedan en libertad, pues parte de los bosques húmedos del continente asiático donde viven, está siendo arrasado por la siembra de la palma aceitera, según National Geographic.
Un estudio publicado en la Public Library of Science (PLoS) ONE, reveló en 2023, que sólo el 16 por ciento de la superficie boscosa del sureste asiático disfruta de protección plena según los criterios de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), por lo que la existencia del gato de cabeza plana podría esta bajo amenaza, de acuerdo con la Comisión Europea.
¿Cómo es el gato de cabeza plana?
El gato de cabeza plana o Prionailurus planiceps (su nombre científico) es prácticamente del tamaño de un gato común, mide aproximadamente 50 centímetros y pesa alrededor de cuatro kilogramos.
Es una especie que vive cerca de cuerpos de agua dulce, que en el año 1980 se creía extinto, sin embargo, fue redescubierto en los años 1990, según Animalia.
Los ejemplares se encuentra en zonas de Malasia y Sumatra. Su pelaje suele ser de color rojizo, marrón y blanco moteado, su cara es un poco más clara y su hocico y barbilla son de color blanco.
A diferencia de otros felinos son ojos están más juntos, lo que le permite tener una visión estereoscópica.
Otra de las características más destacadas del gato de cabeza plana son su patas cortas y palmeadas lo que les permite tener una buena técnica de nado, además, sus garras no son cien por ciento retráctiles, pues eso les ayuda a atrapar a sus presas bajo el agua.