Este baile mezcla catarsis y expresión radical de identidad en la pista, en él, se relacionan íntimamente la fotografía, el cine, las industrias del glamour y la lucha por los derechos LGBTTTI, según CAPITAL LGBTTTI, Guía de la Diversidad en CDMX.
Antecedentes
Su origen puede rastrearse en la década de los 70 cuando, en los clubes gay de Los Ángeles, se reunían afroamericanos, latinos y asiáticos para revelar a ritmo de música funk la identidad que tenían que ocultar durante el día.
“Punking y waacking se llamaban las coreografías que, inspiradas en artes marciales, el uso del nunchaku y gestos sobreactuados de las películas silentes o las caricaturas de Looney Toons, servían para escenificar batallas en los clubes underground de la época”, expone la guía.
Aquel es el antecedente inmediato del voguing, cuyo nacimiento se atribuye a los internos de la prisión de Rikers Island, en Nueva York, quienes buscaban integrar las poses típicas de una sesión fotográfica de la célebre revista de moda Vogue a las batallas de baile. Uno de aquellos personajes era Paris Dupree, quien llevó el voguing a los clubes de baile LGBT+ de Harlem a finales de los años 70.
En el cine
La guía narra que muchos tuvieron un acercamiento al voguing a través de Madonna, pues ella y su productor Shep Pettibone se inspiraron en eso que estaba sucediendo en los clubes nocturnos de Nueva York y que documenta la película Paris is Burning, de Jennie Livingston.
La cinta da cuenta de la cultura de baile neoyorquina y las comunidades gais y transgénero que le daban vida.
Dónde experimentar en la CDMX
De acuerdo con la Guía de la Diversidad en CDMX, un sitio para disfrutar del voguing es El 9, en la calle de Amberes, en la Colonia Juárez, pues “en honor al primer y original bar El Nueve, que cerró sus puertas en 1989, Henri Donnadieu abrió este lugar homónimo que básicamente trae de vuelta las fiestas gais con música disco y luces neón”.
La calidad de sus espectáculos de drags y stand up lo colocan por encima de otras opciones para amanecérsela bailando. “Abre la pista con tus mejores pasos de voguing o perreo, o con tu coreografía especial para los éxitos de Tina Turner. No hay cover y los precios son accesibles”, reseña la guía.
Más que un baile, es cultura
Por si había quedado duda de lo trascendental que es esta manifestación, tienes que saber que hace poco sucedió una exposición en torno a este tema en el Museo Universitario del Chopo; se llamó Elements of Vogue y abordó el estudio de performance radical, entre muchas otras cosas. En el siguiente video puedes explorar de qué trató:
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