Una vacuna para el COVID-19 desarrollada por el Instituto de Microbiología de la Academia de Ciencias de China (IMCAS) obtuvo luz verde para el uso de emergencia a nivel local, dijo el lunes el instituto, con lo que se convierte en la quinta vacuna del país elegible para su uso a escala.
La vacuna ZF2001, que se está probando en un ensayo clínico de última etapa con el objetivo de reclutar a 29 mil participantes en China, Uzbekistán, Indonesia, Pakistán y Ecuador, fue aprobada para su uso en Uzbekistán a principios de este mes.
La ley de administración de vacunas de China permite el uso de emergencia "dentro de cierto alcance y límite de tiempo" de vacunas en medio de una gran crisis de salud.
Entre las cuatro vacunas que China ha aprobado para uso público en general, tres habían sido aprobadas para vacunación de emergencia a pequeña escala antes de obtener autorización para inocular al público en general.
La declaración de IMCAS no especificó qué grupos específicos tendrán acceso a la vacuna.
Se descubrió que la vacuna, que es desarrollada conjuntamente por IMCAS y una unidad de Chongqing Zhifei Biological Products, es segura y desencadena respuestas inmunes en pruebas en humanos en etapa temprana y media, según un artículo publicado el año pasado antes de revisión por pares.
China, que ha estado acelerando los esfuerzos para vacunar a su población contra el COVID-19, había administrado alrededor de 65 millones de dosis hasta el domingo.
El país aún debe aprobar una vacuna desarrollada por empresas extranjeras.
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