Las personas que tienen una mala relación de pareja, se enferman más, mientras que las que tienen una buena relación, tienen menos problemas en su salud, por lo que las relaciones sociales sanas ayudan a sanar lo físico.
De acuerdo con la doctora Luz de Lourdes Eguiluz, investigadora y docente de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la UNAM, las personas que han sido operadas del corazón, cuando tienen una buena relación de pareja, se recuperan de mejor manera que las personas que tienen una mala relación o que viven solas.
“Estamos haciendo investigaciones en torno a la salud mental y las relaciones de pareja, y hemos encontrado que las buenas relaciones familiares son salutogénicas, es decir, que promueven la salud física”, dijo la licenciada en psicología por la FES Iztacala, al tiempo que agregó la división entre cuerpo y espíritu, como dijo Descartes, ya no son indisolubles.
“La mayoría de las enfermedades físicas tienen un correlato psicológico, por lo que una persona que tiene buena salud mental, vive feliz”, dijo la fundadora de la Asociación Mexicana de Suicidología, y de la Sociedad Mexicana de Psicología Positiva.
En ese sentido, la convivencia en sociedad es muy importante para la salud mental. Rodearse de grupos saludables y buscar alcanzar metas es una de las formas en las que podemos estar sanos, más allá del concepto ambiguo de felicidad, lo que hay que buscar es el bienestar.
Un tercio de la población enferma
El 30% de los mexicanos sufre algún trastorno mental, aunque sólo 1 de cada cinco recibe un tratamiento adecuado, según la Asociación Psiquiátrica Mexicana (APM). En promedio, según datos de la Red Voz Pro Salud Mental, un mexicano diagnosticado tarda entre 7 y hasta 30 años en iniciar su tratamiento; en caso de ser internados, el 67% lo hace sin su consentimiento.
El último informe de Enrique Peña Nieto detalla que existen en el país 51 centros integrales de salud mental, así como 32 hospitales psiquiátricos que atienden a cerca de 4 mil mexicanos. No obstante, sólo 26 entidades cuentan con la infraestructura necesaria para atender a pacientes con trastornos mentales.
La doctora Eguiluz considera que no se puede tener bienestar completo si se tiene algún trastorno “una persona ansiosa, que tiene tics, que sólo se puede acostar si ya revisó la puerta 20 veces, no tendrá índices de bienestar altos”.
“El psicólogo debe dejar de enfocarse en un individuo y debe empezar a trabajar en un grupo, formar colectivos sanos, que en sus relaciones colaboren para la sanidad de ese núcleo, que hagan algo por lo demás, que se encarguen del perdón, de la piedad, de la ayuda al prójimo, y no desde el punto de vista religioso, sino que las relaciones sociales ayudan mucho a la sanidad”, dice la autora de más de 60 artículos de investigación en universidades nacionales y extranjeras.
“Son descubrimientos de la neurociencia y de la psicología positiva, de mirar las cosas buenas que vemos, con lo que pueden salir adelante”.