¿Te ha pasado que, aunque quieras, no puedes dejar de comer tus galletas favoritas? Bueno, no es tan raro como piensas. Existen ciertos aditivos alimenticios, como el JMAF, que fomentan el hambre e inhiben la saciedad. De acuerdo a Profeco el consumo de diferentes marcas de repostería industrial puede causar adicción. ¿Quieres saber cuáles son?
Uno de los dos estudios de calidad de la Revista del Consumidor Núm. 552, correspondiente al mes de febrero de 2023, estuvo dedicado a las galletas saladas, marías y de animalitos. Los analistas encontraron que uno de los ingredientes presentes en la fórmula de muchos de estos productos, era jarabe de maíz de alta fructuosa (JMAF). Lo cual encendió las alarmas.
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¿Qué es el JMAF y cuáles son sus implicaciones a la salud?
Acorde a la Escuela de Nutrición de la Universidad de Buenos Aires, el jarabe de maíz de alta fructuosa (JMAF) es un edulcorante comercial añadido a diversos productos, entre ellos, las galletas. El consumo prolongado de JMAF se relaciona con problemas metabólicos.
Entre los problemas a la salud provocados por el edulcorante se encuentran:
- Incremento de apetito
- Aumento de peso
- Mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares
- Incentiva la presencia de hiperuricemia y gota
- Probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2
Estudio de calidad de la Profeco
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informa que las siguientes marcas de galletas saladas, marías y de animalitos contienen JMAF. Muchas de ellas lo enuncian en la declaración nutricional, pero otras se abstiene de hacerlo.
- Aurrera Galletas en forma de animalitos de chocolate
- Golden Hills Galletas Crackers
- Golden Hills Galletas Saladas
- Ke Precio Galletas Marías
- La Moderna Galletas Marías
- Nabisco Premium Marbú Dorada
- Nabisco Ritz
- Precissimo Crackers
- Precissimo Galletas Saladas
- Productos que contienen jarabe de alta fructosa, variante de JMAF:
- Gamesa Crackets
- Gamesa Saladitas
- Marías Gamesa
- Marías Gamesa Azucaradas
- Marías Gamesa Doradas
Profeco indica que el jarabe de maíz de alta fructuosa provoca un efecto paradójico en los consumidores: impide que los alimentos sacien el apetito.
Sabemos que las galletas son deliciosas. También consideramos muy probable que después de explicarle el estudio de la Profeco sobre el JMAF, a tu mamá, ella te responda que es muy interesante todo lo que le estás platicando, pero que, por favor, vayas a la tienda a comprar galletas saladas para acompañar la ensalada de pollo.
Ante tal escenario, es oportuno recordar la filosofía aristotélica, la cual apunta que una persona es virtuosa en la medida que logra encontrar un equilibrio entre la pasión y la acción.
Es decir, no compromete su voluntad ni a los excesos, pero tampoco a la escasez. En otras palabras, no cedas ante el impulso de consumir el paquete entero de galletas tú solo (a).
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La próxima vez que te invada un deseo irrefrenable por comer galletas, hasta el punto que sientas que no puedes dejar de hacerlo, recuerda que, de acuerdo a la Profeco, el culpable puede ser el jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF).
Publicado originalmente en El Sol de Tampico