Ipsy es un sistema de entrega de maquillaje y productos de belleza por suscripción que desde que llegó a México ha causado controversia.
Esta vez no es por el costo, ni por el tamaño de los productos que envían a sus clientas y clientes cada mes, sino por un artículo que enviaron recientemente que parece ser reetiquetado.
En redes sociales, varias personas con la suscripción, la mayoría mujeres, acusaron que les llegó en su última bolsa un producto que presumía en el envase ser un limpiador facial, aunque el contenido provocaba dudas.
¿Gel antibacterial en lugar de limpiador facial?
En redes sociales, sobre todo TikTok, han circulado videos donde las personas descubren que el supuesto limpiador facial Floss tiene una etiqueta superficial y que debajo de ella hay un gel antibacterial.
Diversos usuarios acusaron a Ipsy de estafar a sus clientes y de poner en riesgo su salud, pues el gel antibacterial que tendría el envase indica que tiene 70 por ciento de alcohol en sus ingredientes.
Dicho limpiador facial de la marca Floss incluso había sido anunciado por Ipsy como un nuevo producto que llegaría a las personas en el mes de agosto.
Asimismo, hay personas que argumentan que el envase pudo haber sido reetiquetado para no desperdiciar los del gel antibacterial, pero que seguramente el contenido sí era el limpiador de Floss.
"Es antibacterial con 70% de alcohol y lo anuncian como limpiador facial, salgan a decir algo Ipsy, eso es peligroso" y "La marca Floss existe, en el sitio oficial indica que son una empresa comprometida con el planeta, por lo tal deben reciclar los botes, mas no los productos", son algunos de los que se leen en redes.
Ipsy y Floss responden por productos reetiquetados
Usuarios en redes sociales aseguraron que Ipsy envió un correo luego de varios reclamos por el producto reetiquetado donde la empresa indica que el limpiador de Floss "no cumple con los estándares".
"Por favor te pedimos que deseches el producto, nosotros nos encargaremos de reemplazarlo por uno nuevo que esté a las alturas de tus expectativas", dice el comunicado que compartieron algunos usuarios en redes.
Por último, Floss explicó que el limpiador facial que se envió a través de Ipsy tiene tubos cosméticos reutilizados que se produjeron en exceso durante la pandemia de Covid-19, por lo cual usaron 180 mil contenedores que de lo contrario, hubieran acabado en un vertedero.
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Esto provocó una ola de comentarios de personas que aseguran que la polémica del reetiquetado les hizo reconsiderar su suscripción a Ipsy.
