En entrevista con El Sol de México el académico John Ackerman destacó la urgente necesidad de establecer medidas concretas para garantizar en las plataformas socio digitales la transparencia y la equidad en el proceso electoral del país. Con las elecciones ya en marcha la necesidad de establecer un marco regulatorio sólido es más apremiante que nunca.
Señaló que las plataformas no son neutras ni plataformas tecnológicas que sólo pongan la carretera informativa para que la gente se exprese, sino que tambien hacen curaduría de información en función de intereses económicos y políticos.
En cuanto a propuestas concretas, Ackerman instó a exigir transparencia a las plataformas digitales en cuanto a su funcionamiento y algoritmos, así como la obligación de reportar cualquier financiamiento relacionado con la política. Además, abogó por la necesidad de educación digital y la promoción de audiencias críticas que puedan discernir entre información veraz y falsa en línea.
Mencionó que existen dos fantasías en torno a las redes que es preciso eliminar: “Tenemos que quitar el sueño y la fantasía de que las redes sociales y las plataformas digitales serían un espacio para la espontaneidad, contrario a lo acartonado de los medios clásicos. La otra fantasía es que en las redes sociales solamente se expresan individuos con sus opiniones personales y, efectivamente, las plataformas han sido espacio para opiniones individuales espontáneas pero cada vez más son medios de comunicación que hacen una curaduría de información, privilegian información en función de ingresos, que organizan sus algoritmos en torno a criterios económicos incluso”.
Aseguró que las redes permiten la presencia más fuerte de lavado de dinero y se dejan controlar por los gobiernos, “entonces no es un espacio diferente a los medios tradicionales, tenemos que quitarnos de la idea que son diferentes y totalmente libres”.
El papel de las redes sociales en las elecciones
Señaló que ahora en las elecciones, los principios que deben privilegiarse en las redes sociales son los de garantizar la equidad, la pluralidad de voces, y se debe priorizar lo público sobre lo privado, y lo nacional sobre lo privado.
Destacó las 11 sugerencias para regulación de redes en tiempos electorales del Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad (PUEDJS), que él dirige, entre ellas están la realización de debates electorales digitales, etiquetado de propaganda pagada en plataformas socio digitales y restricción de contenido.
También consideró pertinente que las plataformas emitan informes de transparencia, combate a la desinformación, restricciones específicas y colaboración en el uso de inteligencia artificial, rendición de cuentas y auditorías en contextos electorales, cumplimiento de la vida electoral en plataformas digitales, acceso a la información y educación digital, promoción de plataformas electorales de candidatos, celebración de convenios entre plataformas digitales y autoridades electorales.
El investigador de la UNAM dijo que partidos políticos y autoridad electoral tendrían un papel primordial en la alfabetización digital de las personas para detectar buenas y malas prácticas en redes sociales.
Regulación de redes no debe caer en censura
Ackerman rechazó que regular las redes sea censura, sino una necesaria regulación que, al igual que lo hace con contenidos de radio y televisión, se vigile que se cumpla la ley y nadie viole los principios de equidad en la contienda.
“Lo que nosotros queremos demostrar y convencer es que la censura es otra cosa. La censura es cuando directamente la autoridad o un particular eliminan contenidos contrarios; la censura es el control de los contenidos. Esto que proponemos es algo muy diferente: es la detección de posibles violaciones de la ley, promoción de la desinformación, o campañas pagadas para calumniar”.
Uno de los principales puntos resaltados por Ackerman fue la complejidad de regular las plataformas digitales, dada su influencia global y su dependencia de matrices extranjeras. Sin embargo, subrayó la importancia de no subestimar el papel potencialmente antidemocrático que estas plataformas podrían desempeñar en las elecciones mexicanas, especialmente ante la falta de legislación actualizada.
En términos de principios rectores, Ackerman enfatizó la necesidad de equidad, pluralidad y transparencia en la esfera electoral digital. Argumentó que los mismos estándares que se aplican a los medios tradicionales deberían extenderse a las plataformas en línea, y destacó la responsabilidad tanto de las autoridades electorales como de la sociedad civil en garantizar su cumplimiento.
Ante la pregunta sobre el avance en la regulación de las redes sociales en otros países, Ackerman mencionó experiencias en Brasil, Argentina y Europa, pero destacó la oportunidad única de México para liderar el camino en este campo.
En este sentido, llamó a las autoridades electorales, los partidos políticos y la sociedad en su conjunto a tomar medidas concretas para abordar los desafíos en el ámbito digital y proteger la integridad del proceso electoral.