El Instituto Nacional Electoral (INE) prepara transmisiones específicas de los debates presidenciales que buscarán garantizar el derecho a la información de diversas comunidades históricamente excluidas. Serían cuatro: para la comunidad sorda hablante de Lengua de Señas Mexicana así como tres comunidades y pueblos indígenas.
En una reunión con la consejera del INE, Carla Humphrey, presidenta de la comisión de debates, se reveló que el INE ya planea hacer transmisiones especiales con diversos intérpretes en Lengua de Señas Mexicanas y tres transmisiones en tzotzil, náhuatl y maya (tres de las 68 lenguas indígenas más habladas en el país). En la reunión también estuvieron presentes el director de comunicación de la institución, Iván Flores, así como otros asesores de diversos consejeros y consejeras.
El proyecto ya cuenta con un grado de avance para la transmisión del primer debate que se realizará en las oficinas centrales del INE el 7 de abril y con la moderación de Denise Maerker y Manuel López San Martín. En esta ocasión las y el aspirante a la presidencia responderán las preguntas formuladas a través de redes sociales.
El INE a través del Consejo General está por presentar esta propuesta a los representantes de los diversos partidos e incluso les preguntarán si su candidato o candidata tiene algún o alguna intérprete certificado de su confianza que les gustaría proponer, dijo Humphrey.
¿Cómo sería la transmisión para la comunidad sorda?
Buenas prácticas internacionales, como las hechas en pasados debates en Estados Unidos, Colombia u Argentina, incorporan a diversos intérpretes en la Lengua de Señas de cada país: uno por cada una de las personas a cuadro que suelen ser las personas candidatas y también quien o quienes moderan.
Otro ejemplo de una transmisión para necesidades específicas, aunque no tan completa, fue la que se hizo recientemente en Argentina no hubo diversos intérpretes pero sí un recuadro a mitad de pantalla con una persona que interpretaba en Lengua de Señas Argentina a través de la Television Pública.
Esto se da porque la comunidad sorda, si sólo tiene acceso a una persona que interpreta se puede confundir sobre quién dijo qué o bien perderse del muy interesante intercambio que suele haber, fuera de los tiempos establecidos, entre las personas candidatas.
Si hay diferentes personas que interpretan, quien vive con sordera puede identificar mejor las propuestas de los diversos candidatos o candidatas y así lograr su derecho a la información en igualdad con el resto de la ciudadanía.
En la reunión, Iván Flores informó que se encuentran en pláticas con Canal Once, del Instituto Politécnico Nacional y con el Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR) para poder transmitir estas transmisiones especiales, también en vivo pero en una señal multiplexada como 11.1, 11.2 o 11.3
Flores presentó una imagen donde el INE contempla a cuatro intérpretes: tres para las personas candidatas (Jorge Álvarez Maynez, Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum) y otro para las personas que moderan.
¿Una posible alianza INE- sociedad civil?
A la reunión que buscamos como una iniciativa más del colectivo #YoTambiénVoto2024 para hacer ver la necesidad de la comunidad sorda de tener varios intérpretes, también asistió Noé Romero, intérprete de Yo También y socio de EN Traduccion, Interpretación y Accesibilidad, quien junto con otros intérpretes oyentes y sordos, ya tienen un proyecto para hacer estos debates accesibles para la comunidad sorda.
Esta iniciativa ya ha sido realizada en procesos electorales pasados por este grupo de intérpretes (tanto sordos como oyentes) comprometidos con el derecho a la información de la comunidad sorda a través de Facebook. En los debates presidenciales de 2018 sin avisar previamente, en la página Foro LSM, tuvieron 26 mil personas que siguieron su transmisión.
Este año esta iniciativa, que busca financiamiento para realizarse y pagarle a las personas que interpretan por su trabajo, implicaría idealmente un equipo de 29 personas: seis de producción, cuatro de staff, 11 intérpretes sordos y 11 intérpretes oyentes. Esta iniciativa de la comunidad sorda ya tendrá su primer ensayo el sábado 23 de marzo.
Los intérpretes oyentes escucharían la transmisión detrás de cámaras e interpretarían a la persona sorda quien a su vez, dando características únicas lingüísticas de una persona hablante de Lengua de Señas mexicana como lengua materna, sería quien estaría a cuadro.
Romero planteó la importancia de utilizar el trabajo de intérpretes sordos calificados ya que se garantiza en mayor grado que el mensaje reformulado en LSM se expresa con mayor fidelidad, naturalidad y acorde a la cultura y cosmovisión de la comunidad de personas sordas.
“La participación activa y permanente de personas sordas en todos los procesos que impliquen el acceso a alguno de sus derechos es indispensable, implica dejar de lado las creencias de lo que el otro necesita y empezar a escuchar y atender sus necesidades. La participación de personas intérpretes en LSM sordas para hacer accesible la información a la comunidad de personas sordas es una obligación que los intérpretes oyentes y las instituciones tenemos por mera justicia social, laboral y lingüística”, señaló Romero.
En la reunión quedamos de volvernos a comunicar tras la reunión del Consejo General donde se plantearía esta iniciativa para preguntarles a los partidos si ellos tienen algún intérprete certificado de su preferencia o no. Tras esta reunión se vería la posibilidad de colaborar.