- Para asegurar inversiones, producción y empleo, se debemejorar el estado de derecho y responsabilidad fiscal, y combatirla corrupción e impunidad
A pesar de los límites que podrían tener las ideas de campañade Donald Trump, entre ellas la deportación de millones deindocumentados mexicanos, nuestro país debe ser “blindado” conla resolución de sus reformas pendientes sobre estado de derecho,corrupción, impunidad y responsabilidad fiscal, a fin de asegurarinversión, producción y empleo, según informes del Centro deEstudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Tras mencionar que Donald Trump será el presidente número 45de Estados Unidos a partir de enero del 2017, dicho organismoseñaló que, evidentemente no es lo mismo hablar como candidatoque actuar como presidente. Existen diversos factores reales queimponen límites a los deseos o propuestas de un dirigente deEstado, aun contando con el apoyo de la mayoría en elCongreso.
“La preocupación por las propuestas que podrían afectar laeconomía de nuestro país, y que fueron parte importante de lacampaña de Trump, como la deportación de millones deindocumentados mexicanos, imponer un impuesto a las remesas queenvían los mexicanos, la modificación o la salida de EstadosUnidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)deben ser evaluadas de manera más objetiva, por lo que vale lapena reflexionar sobre qué tanto podrían impactar a nuestro paíscomo a la economía estadunidense, con el objetivo de ponderar laprobabilidad de que realmente se pueda ejecutar lo que el candidatopropuso”, destacó el Ceesp.
De acuerdo con el organismo, modificar o salir del Tratado deLibre Comercio, no es sencillo. Es cierto que Estados Unidos esnuestro principal socio comercial toda vez que, del total denuestras exportaciones, alrededor de 380 mil millones en el 2015,el 80 por ciento se dirigió a ese país, pero también lo es elhecho de que de nuestras importaciones totales, 395 mil millones,cerca del 50 por ciento provinieron de la economía estadunidenseen ese año.
“Es importante señalar que todos los estados de la Uniónamericana tienen una relación de intercambio comercial conMéxico, sobresaliendo Nuevo México, que del total de susexportaciones 44.5 por ciento se dirigen a nuestro país. Le siguenen importancia, Arizona con el 40.4 por ciento, Texas con el 37.3por ciento, Dakota del Sur con 28.2 por ciento y Michigan con 21.9por ciento, entre otros”, resaltó la agrupación en un AnálisisEconómico Ejecutivo.
Expuso que los empleos directos que dependen de estas ventas aMéxico suman cerca de seis millones de personas, más sus familiasy se puede decir que los relacionados específicamente con el TLCANson cerca de dos millones de personas. “Si se considera además atodos aquellos, cuyos empleos dependen del consumo de estostrabajadores -y sus familias-, estamos hablando de una cifraconsiderablemente mayor, que podría estar cerca de los ochomillones de empleos que se perdieron durante la gran crisis”.
Por otra parte, el Ceesp resaltó que imponer un impuesto a lasremesas familiares, implica un serio problema, toda vez quetendría que hacerlo para todo tipo de flujos financieros. Seríaimposible distinguir inversiones financieras y otras transferenciasde las remesas. Habría una brutal disrupción en todo tipo deflujos financieros, además de que se tendría que discriminarprobablemente entre países y en ese caso siempre se podríantriangular los envíos.