La ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) puede generar el resurgimiento de un movimiento obrero nacional con una estructura corporativista dentro de Morena, el partido en el poder, similar a que tuvo la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM) con el PRI, y el cual está bajo la batuta de Napoleón Gómez Urrutia.
De acuerdo con un análisis de Citibanamex al reporte que hizo la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (USITC, por sus siglas en inglés) sobre el acuerdo trilateral, México enfrenta riesgos en materia laboral, como una gran estructura sindical.
El pasado 23 de abril, Richard Trumka, presidente de la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales, el sindicato más grande de Estados Unidos, esgrimió ese argumento para oponerse a la ratificación del tratado.
Según afirmó, "falsos sindicatos" mexicanos afiliados al gobierno habían negociado 700 mil contratos colectivos ilegítimos diseñados para bajar los salarios.
"Eso significa que tendrán que cambiar 175 mil (contratos colectivos) al año durante los cuatro años que se les ha otorgado en el acuerdo y tendrán que tener 175 mil elecciones" sindicales para aprobarlos, dijo.
En sentido contrario, el reporte de la USITC, entre los beneficios que Estados Unidos ve en el TMEC está el aumento de 17.2 por ciento en los salarios del personal sindicalizado mexicano.
El análisis advierte que una mayor tasa de sindicalización puede conducir a una segmentación del mercado laboral y a una tasa de empleo subóptima.
Además, el documento indica que existe la posibilidad de que la Confederación Internacional de Trabajadores, sindicato liderado por Gómez Urrutia, se convierta en un brazo del gobierno federal, como fue la CTM para el PRI.
“Ésta es una razón para esperar el apoyo al acuerdo por parte de las organizaciones de trabajo en Estados Unidos y Canadá, ya que el presidente de la comisión del Senado encargada del asunto (Napoleón Gómez Urrutia) tiene una relación cercana con sus homólogos”, detalla.
El objetivo de integrar temas laborales en el tratado comercial es asegurar que todas las partes cumplan sus obligaciones como miembros de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Incluso, el mes pasado, la Cámara de Representantes en Estados Unidos advirtió que el Congreso de ese país no ratificará el TMEC, hasta que se concrete la aprobación de una reforma laboral en México.
El Senado avaló el cambio legislativo en la materia en México el pasado 29 de abril, el cual era necesario para la entrada en vigor del acuerdo.
Pese a ello, la armonización de las condiciones laborales fue uno de los temas más sensibles para ratificar el TMEC.