El Banco de México (Banxico) redujo la tasa de interés de referencia a 5.50 por ciento y anticipó que las afectaciones por la emergencia sanitaria en la economía serán más profundas en el segundo trimestre, con contracciones importantes en el empleo.
Para el Banco Central, el balance de riesgos para la actividad económica ha pasado de ser "sesgado a la baja", como lo mencionó en su anuncio de política monetaria de mediados de febrero, cuando sólo consideraba el estancamiento durante los trimestres previos, a uno "significativamente sesgado a la baja", en su más reciente reunión de este jueves al incorporar los efectos de la emergencia sanitaria derivada del coronavirus.
La decisión de bajar la tasas fue unánime y el comunicado reconoce además que la trayectoria esperada para la inflación es incierta, debido a la reducción en los precios de los energéticos y la apreciación del dólar frente al peso.
"Los retos derivados de la pandemia para la conducción de la política monetaria incluyen tanto la afectación sin precedentes en la actividad económica, como los asociados al choque financiero que enfrentamos", coincidieron los miembros de la Junta de Gobierno.
Por ello, anunciaron que tomarán las acciones que sean necesarias con base en la información adicional, la fuerte afectación a la actividad productiva y la evolución del choque financiero.
Tras el anuncio del recorte -el cuarto en lo que va del año-, el peso mexicano se apreció 1.53 por ciento, o 37 centavos, cotizando alrededor de 23.82 pesos por dólar.
DESEMPLEO PREOCUPANTE
Si bien el objetivo prioritario del Banco Central es mantener una inflación baja y estable, en sus últimas reuniones de política monetaria ha puesto especial atención a las implicaciones de la actual crisis sobre el empleo.
La minuta de la reunión del 21 de abril da cuenta que uno de los integrantes de la Junta de Gobierno estimó que entre mediados de marzo y abril se habrían perdido 700 mil puestos de trabajo formal, mientras que durante la crisis de 2009 se perdieron cerca de 600 mil en 12 meses.
Al final, la pérdida fue de 753 mil 280 plazas en ese mes y medio, confirmó el Seguro Social el miércoles pasado.
Bank Of America Merrill Lynch (BofA) calcula que la pandemia se cobrará 1.2 millones de trabajos formales este año.
Después de las cifras dadas a conocer por el Seguro Social, el banco de inversión estadounidense prevé que la destrucción de trabajos formales continúe, aunque a una menor velocidad conforme la economía se reabra gradualmente.
En un análisis, Bank Of America señaló que la caída es consistente con la expectativa de una contracción del PIB de ocho por ciento este año.
El balance del año apunta a una pérdida de 494 mil empleos formales entre enero y abril. Del total de la contracción que prevé el banco, la mayor parte se concentrará en el segundo trimestre (-660 mil puestos), mientras que para el tercer trimestre desaparecerán 420 mil y habrá una ligera recuperación de 52 mil en los últimos tres meses del año.
La mayoría de los puestos perdidos serán permanentes y se concentrarán en el sector servicios, advierte el BofA.
“Una destrucción de empleo tan grande empujará al gobierno a incrementar los apoyos fiscales para respaldar a los desempleados, mientras México tiene una muy pequeña red de seguridad. Aunque es poco probable que el gobierno aumente su gasto en grandes cantidades", señala.
De acuerdo con cifras del IMSS, el año pasado se crearon 342 mil empleos para cerrar 2019 con 20 millones 421 mil 442 plazas laborales.