El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, afirmó este lunes que de confirmarse el anuncio de la imposición de aranceles estadounidenses a la importaciones de acero y aluminio brasileños no dudaría en llamar directamente a su par estadounidense, Donald Trump.
En declaraciones a la prensa en Brasilia, Bolsonaro dijo que se informaría de la situación con su ministro de Economía, Paulo Guedes.
"Voy a conversar con Paulo Guedes. Y si fuera el caso (...) llamo a Trump. Tengo un canal abierto con él", afirmó.
El ultraderechista Bolsonaro se proclama un aliado ideológico de Trump, y el anuncio de aranceles contra Brasil y Argentina (un país que acaba de elegir a un presidente de centroizquierda) representa un duro golpe para su gobierno.
Estados Unidos es el primer cliente de productos de acero semiacabados de Brasil.
Trump explicó el lunes por la mañana en un tuit que "Brasil y Argentina han devaluado fuertemente sus monedas, lo que no es bueno para nuestros agricultores".
"Por lo tanto, con vigencia inmediata, restableceré las tarifas de todo el acero y aluminio que se envíe a Estados Unidos desde esos países", agregó.
La moneda brasileña se depreció un 5% desde inicios de noviembre frente al dólar, batiendo sucesivos mínimos históricos. La semana pasada, superó por primera vez los 4,27 reales por dólar, frente a 4,01 a inicios de noviembre. Este lunes el billete verde se cotizaba a 4,23 reales.
La depreciación, según analistas, se debe principalmente a las incertidumbres provocadas por la guerra comercial entre China y Estados unidos y a las dudas de los inversores sobre la capacidad del gobierno de proseguir con su plan de reformas promercado.
Trump había anunciado a inicios de 2018 la implantación de aranceles de 25% al acero y de 10% al aluminio, pero luego sacó a varios países de la lista, entre ellos Argentina y Brasil.