La gestión de David Colmenares Páramo al frente de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha presentado un aumento en el número de auditorías realizadas. Sin embargo, también se ha distinguido por una disminución en la recuperación de dinero para el país.
De acuerdo con información de las cuentas públicas de la ASF, de 2016 a 2022 (último año con información completa), las recuperaciones de dinero operadas por la institución disminuyeron un 84 por ciento.
En 2016, la ASF, a través de auditorías en las que detectó posibles daños al erario, consiguió una recuperación de recursos públicos equivalente a 14 mil 229 millones de pesos. En cambio, para la cuenta pública del 2022, únicamente logró recuperar 2 mil 218 mdp.
Con David Colmenares al frente —ingresó como titular en marzo de 2018—, la ASF ha presentado un alza en el número de auditorías realizadas en el país, además, abarcando un mayor número de entidades fiscalizadas.
Un análisis de las diversas cuentas públicas realizado por El Sol de México revela que en el 2022 se realizaron dos mil 153 auditorías a mil 119 entidades, cifras inéditas en la historia de la ASF. Para 2023 se programaron dos mil 258 auditorías, que representan 20 por ciento más que las realizadas en 2016, cuando se encontraba como titular Juan Manuel Portal Martínez.
Otra de las diferencias es el número de auditorías realizadas a organismos del Poder Ejecutivo; es decir, a instituciones pertenecientes al gabinete presidencial. En la Cuenta Pública de 2016 se informa que a este poder se le realizaron 468 auditorías, mientras que en 2022 se practicaron 382.
En el Poder Judicial también disminuyeron las auditorías: a este poder se le realizaron 10 auditorías en 2016, mientras que en 2022 se realizaron cuatro.
La administración de David Colmenares, quien ingresó en marzo de 2018 a su cargo, ha sido señalada por exempleados de llevar a cabo prácticas nocivas al interior de la ASF, entre las que se encuentran autocensura o remoción de auditorías.
Las acusaciones fueron realizadas por Agustín Caso Raphael, un miembro del área de auditorías de desempeño. En una carta que circuló tras su remoción, Caso acusó a David Colmenares, titular de la ASF, de llevar a cabo una "captura" de la institución.
Según la denuncia pública, la ASF ha incurrido en negligencia de los principios fundamentales de separación de poderes, así como en una disminución de la autonomía e independencia en la función de fiscalización.
Otros auditores, como Dora Muna Buchahin y Gerardo Lozano Dubernard, han denunciado irregularidades en la gestión de Colmenares. Este último enfrentó una fuerte reprimenda por parte del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, después de elaborar una auditoría que estimaba los costos de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).
Inclusive, se ha hecho pública una nueva práctica en la que la ASF envía borradores de informes a las dependencias gubernamentales para su revisión, lo que resulta en una reducción significativa en las observaciones y montos de irregularidades reportadas.
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Para suplir a Caso, Colmenares anunció a Arely Gómez como la nueva auditora especial de Desempeño. Gómez se desempeñó dentro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), donde ocupó los cargos de coordinadora de Ponencia en la Segunda Sala, Secretaria General de la Presidencia y Oficial Mayor.
En el sexenio de Enrique Peña Nieto fungió como titular de la extinta Procuraduría General de la República (PGR).
