El Infonavit confirmó que entregará de manera directa y sin intermediarios los recursos ahorrados por los trabajadores para acceder a una vivienda, comenzar su construcción o comprar un terreno, dijo Carlos Martínez Velázquez, director general del Instituto.
“El concepto general de la reforma es darle libertad al trabajador para elegir en qué quiere usar su Subcuenta de Vivienda, cómo la quiere usar y cuál es el destino de vivienda que le quiere dar a su dinero, porque es su dinero”, enfatizó en entrevista con El Sol de México.
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Añadió que con la reforma también cambiarán algunas reglas para darla mayor flexibilidad a los créditos.
El objetivo, dijo, es que los derechohabientes puedan financiar la compra de terrenos destinados a casa habitación, refinanciar las deudas hipotecarias y dar un segundo o tercer crédito cuando se liquide el anterior.
“Esos tres elementos más la autoconstrucción, que ya se preveía en algunos programas que estábamos haciendo en el Infonavit, permiten al trabajador hacer mejor uso de su subcuenta y sobre todo tener más opciones” al solicitar un crédito al Instituto, agregó.
El pasado 6 de octubre el Ejecutivo federal envió al Congreso de la Unión reformas a diversos artículos de la Ley del Infonavit para que los trabajadores formales reciban el monto de su crédito directamente y sin intermediarios, pues actualmente estos recursos se otorgan a la inmobiliaria o propietario que vende la vivienda deseada por el trabajador.
Ayer por la mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador coincidió en que la reforma busca dar mayores libertades a los trabajadores y evitar intermediarios para adquirir su vivienda.
Reconoció que aún no hay acuerdos definitivos, por lo que sostuvo una reunión con el Consejo de Administración del Infonavit para explicar su propuesta y generar los arreglos necesarios.
López Obrador añadió que en todos los créditos las tasas sean disminuidas para que se pueda disponer del dinero como ciudadanos conscientes que no requieren de intermediarios ni de “coyotes”.
RECURSOS BLINDADOS
Carlos Martínez aseguró que cualquier preocupación en torno a los cambios previstos es infundada, ya que atiende a una necesidad real de la población, al existir un rezago habitacional de 9.4 millones de acciones vivienda, donde “prácticamente el 70 por ciento corresponde a necesidades de mejoras o ampliación de la vivienda”.
Como informó El Sol de México, analistas económicos consideraron que la entrega directa de la subcuenta de ahorro del Infonavit a los trabajadores abre la puerta a que estos recursos se ocupen para construir en terrenos irregulares o que se utilicen para otros fines que no tengan que ver con la construcción o adquisición de una vivienda.
El director del Infonavit contrastó que se parte de la confianza al trabajador para que éste utilice sus ahorros en la construcción o adquisición de una vivienda; aunque ya cuentan mecanismos de seguimiento para corroborar que los recursos se ocupen para el fin manifestado, incluso de manera digital.
“Por ejemplo, hoy el crédito de mejora que da el Instituto, prácticamente en su totalidad, se utiliza para elementos de vivienda y tenemos los datos de utilizaciones de crédito y la gente compra varilla, cemento, pintura y demás.
El concepto de la reforma es darle libertad al trabajador para elegir en qué quiere usar su subcuenta de vivienda
“Y hay mecanismos electrónicos, de hecho ahora que estamos habilitando el crédito Construye Infonavit, la idea es que el trabajador tenga un mecanismo electrónico de seguimiento donde él va tomando fotos de cómo avanza su obra y tiene un proyecto presentado antes de solicitar el crédito”, comentó.
Añadió que observa buen ánimo de todos los sectores y legisladores, por lo que espera que con la aprobación de esta reforma, el Consejo de Administración del Infonavit establezca las reglas de operación para que funcione adecuadamente.
Añadió que imposible que estos recursos se utilicen para construir en terrenos irregulares. “Hoy las reglas de otorgamiento prohíben dar créditos cuando una zona está catalogada como riesgosa, por el Atlas Nacional de Riesgos”.
Para el caso de la adquisición de terrenos, dijo, es menos problemático, porque exigirán pruebas de “que el terreno exista, que esté libre de gravamen, que esté registrado en el Registro Público de la Propiedad y que tenga uso habitacional. Y esa verificación se hace previo a la compra y el monto sería lo que vale el terreno”.
Con información de Juan Pablo Reyes