En 2020, los 50 bancos del país reportaron ganancias por 102 mil millones de pesos, lo que implicó una reducción de 39.5 por ciento o 61 mil millones de pesos con relación al mismo periodo del año pasado, reveló la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Este monto es su peor caída desde la crisis financiera de 2008, además de que se acumularon 12 meses consecutivos de retrocesos.
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Según el organismo regulador, la cartera de crédito vigente también reportó una baja anual de 5.3 por ciento, con 5 billones 167 mil millones de pesos. Al interior de este rubro, los créditos al consumo sufrieron una contracción de 11.4 por ciento, al tener 955 mil millones de pesos.
Este portafolio agrupa los financiamientos automotrices, de nómina, tarjetas de crédito, así como préstamos personales, los cuales disminuyeron gracias a la poca capacidad de pago de los usuarios y una moderación en sus gastos cotidianos.
De acuerdo con Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), la gente cada vez es más cautelosa para solicitar un crédito ante el banco, porque su ingreso disminuyó o simplemente porque no quieren más deudas.
Además, ha reiterado que la banca del país tiene los recursos suficientes para afrontar la crisis derivada por el coronavirus y el sector debe de verse como parte de la solución ante la contingencia sanitaria.
“El resto del año vamos a continuar atendiendo la demanda de crédito con la liquidez sobrada que tenemos y buscando la forma de apoyar a los sectores que más necesitan la reactivación”, puntualizó en conferencia de prensa.
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A pesar de este escenario, la CNBV expuso que a diciembre de 2020, el Índice de Morosidad (IMOR) del sector bancario llegó a un 2.56 por ciento, igual a un aumento de 0.36 puntos porcentuales respecto al mismo lapso de 2019.
