Un llamado a las grandes organizaciones sindicales internacionales como la AL-FCIO, Steel Worker, el CILA a dejar atrás el pasado, ver el presente hacia el futuro, dejar a un lado antagonismos e injerencias que violentan la soberanía laboral y ahora, en el marco del T-MEC llegar a acuerdos responsables, colaborar en asesorías y cooperación técnica entre los 3 países y los sindicatos.
Y para el bien de la globalización de la economía, hacer una reflexión para que haya tres maneras de ganar: Que gane México, que gane Estados Unidos y que gane Canadá, demandó el secretario general adjunto de la CTM, Tereso Medina Ramírez.
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En entrevista con El Sol de México afirmó “que sí es posible que coexistan la CTM, con la AL-FCIO y poner en el centro de la mesa a los trabajadores de los países signatarios del T-MEC y sus familias. Y a partir de ahí ver la posibilidad de cohabitar bajo principios de reglas claras en cada uno de los tres países”.
Afirmó que “la injerencia sindical extranjera, es un tema muy importante, porque de alguna manera se violenta la soberanía laboral. Y sería una muy buena noticia que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), pusiera cartas sobre el asunto”.
Puntualizó: “No para cerrar la intervención de los organismos internacionales en el país, sino para regularla, que no se viole la autonomía de los sindicatos y mucho menos la soberanía nacional. Y por otro lado, que se pueda reglamentar su presencia en México y que exista piso parejo para todos”.
Enfatizó que actualmente, las injerencias extranjeras, en este caso la AL-FCIO, la Steel Worker de los Estados Unidos, entre otros, vienen a entrevistarse con ciertos grupos sindicales y dejan de lado a centenares de organizaciones auténticamente representativas que todas en su conjunto representan el movimiento sindical en México.
Sostuvo que “este tema se tiene que analizar también, no con la intención de cerrar la puerta sino para regular estas diferencias en un sentido de que podemos llegar a acuerdos responsables y colaborar en asesoría y cooperación técnica entre los países y los sindicatos”.
¿Concretamente, con la AL-FCIO, Steel Workers y demás?
-Concretamente el Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS), una institución que solamente retoma a ciertos sindicatos; el apoyo del Centro de Solidaridad que tiene la AFL-CIO en México y responde a ciertos sindicatos, no a todos.
Entonces, no podemos rechazar esta injerencia o esta intervención, pero si regularla para que haya piso parejo para todas las organizaciones sindicales.
¿Las Ligas Sindicales Independientes es parte de esa injerencia de las grandes organizaciones gremiales de EU?
-La aparición de Ligas Sindicales Obreras, por ejemplo. Y de otros organismos que pertenecen a la famosa Federación de Sindicatos Independientes de las Industrias Automotriz, Autopartes, Aeroespacial y del Neumático (FESIIAAAN), que son financiados con recursos del extranjero a través de esos organismos internacionales.
En este caso repito, no se trata de dejar esa participación o apoyo sino que se regulen estas injerencias o apariciones de grandes organizaciones sindicales del extranjero, para que le vaya bien a México.
¿Cuál es el objetivo?
-Sostengo que sí le va bien a los trabajadores le va bien a México y que quede claro: el objetivo es ponerse de acuerdo para poder impulsar un verdadero sindicalismo responsable en México, progresista y democrático.
En este momento, nadie, ninguna central obrera podemos estar en contra de la libertad sindical, ni podemos estar en contra de que los trabajadores puedan elegir libremente por el sindicato inclusive si el contrato colectivo lo acepta o lo rechaza.
O bien, el mandato de los trabajadores de tal o cual sindicato para que puedan firmar un nuevo contrato colectivo.
Es decir, que nos pongamos de acuerdo realmente para poder implementar las mejores estrategias e impulsaren la democracia sindical, la Reforma Laboral que ya está en marcha.
¿Puede haber acuerdos, coexistencias entre la CTM y la ALF-CIO y todas las grandes corporaciones estadounidenses?
-Estoy convencido que sí. Hacer el ejercicio y aprovecho decirlo en mi calidad de representante sindical en la CTM. Hacer un llamado a estos organismos internacionales a que con voluntad de hacer las cosas, que dejemos a un lado el pasado. Ya es pasado y que veamos el presente hacia el futuro.
Y que volvamos a reestructurarnos. Y sí en el pasado éramos de alguna manera organismos sindicales antagónicos, ahora en el marco del T-MEC, para el bien de la globalización de la economía, podamos hacer una reflexión en ese sentido y llegar a acuerdos responsables y que haya 3 maneras de ganar: que gane México, gane EU y gane Canadá.
¿En el caso de los sindicatos canadienses hay menos injerencia?
-Hay menos injerencia. Hay mucho más injerencia de EU hacia México. Por eso repito que sería muy buena noticia que dejáramos el pasado que ya es histórico. Que veamos el presente hacia el futuro así como tres compromisos al mismo tiempo.
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Que pongamos en el centro de la mesa a los trabajadores de los países que estamos signando el T-MEC y sus familias. Y que a partir de ahí, veamos la posibilidad de cohabitar bajo principios de reglas claras en cada uno de los países.
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