Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, pidió a los empresarios una oportunidad para el presidente Andrés Manuel López Obrador. La "confianza la van a tener y la certidumbre va a estar", les aseguró.
"Sí nos importa la inversión privada. Cuando Andrés dice no quiero deuda, no quiero déficit, entonces en manos de quién va a estar el crecimiento. Estoy realmente motivado a ganarnos la confianza de todos ustedes. O lo cobijamos o lo cobijan otros, hay que dar un tregua, dar el beneficio de la duda porque no vamos fallar", dijo durante un encuentro en un conocido restaurante.
México, les dijo el también empresario, "es un país con dos caras. La nuestra, como vivimos nosotros, muy cómodos, muy prósperos, porque nos han dado un marco próspero, pero hay 70 o 60 por ciento de gente que dice que no, que no es así".
El encuentro fue casual y ameno. Ante los asistentes, entre quienes se encontraban Doña Paquita Ramos de Vázquez, presidenta y directora general de Organización Editorial Mexicana y Francisco José Torres Cano, director general de Ventas y de Estudios Tepeyac, el jefe de la Oficina de la Presidencia se sinceró: “ahora que he estado muy cerca de ver del otro lado lo que está pasando en México le decía a mi esposa, a mis hijos y a unos amigos: entre más te metes y ves lo que hace falta, más lo entiendes".
Además de empresarios como Antonio Cosío Ariño, presidente del grupo hotelero Las Brisas y de Grupo Pando, y Eduardo Tricio, de Grupo Lala, también acudió la líder de Morena, Yeidckol Polevnsky.
"Ayúdenos a mantener el barco en el centro, porque los dos extremos son muy radicales, los de acá y los de allá, y eso no nos va a llevar a ningún lado".
“Mi trabajo no sólo es la Oficina de la Presidencia, me están dando de responsabilidad la banca de desarrollo, me están dando la responsabilidad del crecimiento de México (...) por eso estoy aquí, la parte política no la entiendo, pero la parte de promocionar a México, de atraer inversión, de que mexicanos inviertan más, eso me encanta, si no, no estuviera aquí’’.
“Nunca -dijo- ha habido en la Oficina de la Presidencia el mandato del crecimiento. Históricamente siempre ha estado el mandato en el Banco de México con el control de la inflación, en Hacienda, el gasto y el crecimiento, se nos olvidó. Es una propuesta que le hice al presidente Zedillo y ahora Andrés lo compró. Ser un puente entre el sector privado y el público’’.