Nissan descartó planes, en este momento, de una reducción adicional en su equipo de trabajo para México y la región.
El fabricante de automóviles japonés anunció una importante caída de sus beneficios y la cancelación de 12 mil 500 puestos de trabajo, en el marco de una profunda reestructuración de su producción tras el despido de su presidente Carlos Ghosn.
“Nissan ha tomado ya los pasos para adecuar la estructura que corresponde a Norteamérica. Mientras continuamos monitoreando y reaccionando a las demandas del mercado no tenemos planes en este momento de realizar ninguna reducción adicional en nuestro equipo de trabajo para México y la región”, comentó la empresa a El Sol de México.
Desde diciembre pasado, Nissan México anunció un ajuste en sus niveles de producción en sus dos plantas, la de Cuernavaca (Morelos) y Aguascalientes, lo que se tradujo en el despido de cerca de mil trabajadores. Este proceso, confirmó la armadora, ya terminó.
Hoy, Hiroto Saikawa, en una rueda de prensa en la sede del grupo en Yokohama, en las afueras de Tokio, informó que el grupo aplicó en los últimos meses recortes en ocho plantas distintas, en España e Indonesia, entre otros países, lo que llevó a suprimir seis mil 400 puestos de trabajo.
Hasta 2023 el grupo seguirá reduciendo puestos de trabajo en otras seis plantas, con el propósito de cerrar líneas de ensamblado hasta permitir una reducción del 10% de la producción.
"Las líneas [de producción] que no sean rentables, sobre todo en el extranjero, se verán afectadas", dijo Saikawa, sin dar detalles, aunque según los medios japoneses América Latina sería una de las zonas más afectadas.
En el primer trimestre del ejercicio 2019/20, los beneficios de Nissan –socio del fabricante francés Renault– se hundieron a su nivel más bajo desde la crisis mundial de 2008-2009.
"Reconocemos que los resultados son muy mediocres", dijo Saikawa.
En concreto, entre abril y junio, el beneficio neto de Nissan cayó casi un 95%, hasta 6.400 millones de yenes, mientras que su facturación se redujo 12.7%, hasta 2.37 billones de yenes en ese periodo.
El beneficio de explotación cayó por su parte en 98.5%, hasta mil 600 millones de yenes.
"Tenemos que admitir que estas cifras son inferiores a nuestras estimaciones pero pensamos que podemos mejorarlas" en los próximos trimestres, aseguró el presidente de Nissan.
"Nuestras acciones traen sus frutos", en particular en Estados Unidos, aseguró.
Nissan explicó sus resultados por el freno del mercado automóvil mundial, pero también como consecuencia de su cambio de estrategia tras el arresto de Ghosn por presuntas malversaciones financieras.