Designan a síndico del caso Oro Negro

Entre sus asignaciones más reconocidas está la de haber sido el conciliador en el proceso del concurso mercantil de Mexicana de Aviación

Juan Luis Ramos | El Sol de México

  · jueves 20 de junio de 2019

Fernando Pérez-Correa es el síndico a cargo de Oro Negro después de la quiebra / Foto: Especial

El Instituto Federal de Especialistas de Concursos Mercantiles (Ifecom) designó a Fernando Pérez-Correa Camarena como síndico de la empresa de servicios petroleros Oro Negro, declarada en quiebra por un juez federal la semana pasada.

Con 20 años de experiencia, Pérez-Correa se registró como conciliador y síndico ante el Ifecom en 2005. Entre sus asignaciones más reconocidas está la de haber sido el conciliador en el proceso del concurso mercantil de Mexicana de Aviación.

El año pasado fue designado interventor en el concurso mercantil de Oro Negro y, hace unos días ratificado como síndico de la empresa que rentaba plataformas a Pemex.

El abogado tendrá a su cargo la enajenación de la masa concursal de la compañía, compuesta por el conjunto de sus bienes y derechos, para obtener el mayor valor posible y proceder al pago de deudas de la empresa con sus acreedores. La deuda de Oro Negro, la empresa de Gonzalo Gil White, hijo del exsecretario de Hacienda y Crédito Público Francisco Gil Díaz, asciende a 900 millones de dólares, según indicó Daniel Díaz, abogado de los bonistas.

La tarea del síndico, añadió Díaz, será complicada debido a que Oro Negro no posee ningún activo fijo que pueda rematarse. El único bien con el que cuenta la empresa es el valor que se le pueda otorgar a los juicios que tienen en contra de Pemex, sus acreedores y el gobierno mexicano, en caso de que ganara, señala el abogado.

Incluso las plataformas que Oro Negro rentó a Pemex por cantidades millonarias durante la gestión de Emilio Lozoya como director de la petrolera estatal no cuentan como bienes que puedan venderse para solventar la deuda de la compañía, ya que no le pertenecían.

La compañía obtuvo contratos de arrendamiento en ese periodo por más de 18 mil millones de pesos.

Los equipos marinos Primus, Decus, Ímpetus, Fortius y Laurus, que se localizaban frente a las costas de Campeche eran de compañías de Singapur acreedoras de Oro Negro.

En mayo, un juez federal ordenó que esa bases fueran devueltas a su dueños al comprobar que la empresa de Gil White carecía de los recursos para darles mantenimiento adecuado.

Pérez-Correa tendrá poco margen para actuar, según comentó el abogado de los acreedores, por lo que estimó que el caso se cierre en unas semanas.