"Las Direcciones Generales de Carreteras y de Conservación de Carreteras del gobierno federal cometieron diversas irregularidades y deficiencias durante el año pasado, al momento de entregar contratos para servicios relacionados con obra pública, como la elaboración de estudios y ejecución de actividades en materia de impacto ambiental en distintos proyectos, entre otros.
De acuerdo con auditorías realizadas por el Órgano Interno de Control, las divisiones de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) incumplieron con requerimientos y la normatividad aplicable a los convenios celebrados con distintas empresas para estas actividades públicas.
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“Se observaron diversas deficiencias e irregularidades por parte de los servidores públicos adscritos a la Dirección General de Carretera, en la licitación, ejecución y supervisión de los servicios a la obra pública a su cargo”, señala la auditoría 02/2023, realizada en el primer trimestre de este año.
Otra auditoría, la 03/2023, advierte de “debilidades en los sistemas de control y operación del área fiscalizada”.
Las observaciones se refieren a irregularidades en los procedimientos de licitación y adjudicación, contratos, servicios realizados sin apego a especificaciones convenidas, integración de precios improcedente, sustitución de personal no acreditado y falta de documentación vigente por parte de las empresas, entre otras.
El Órgano Interno de Control revisó 10 contratos otorgados por ambas direcciones que, en conjunto, suman 91.3 millones de pesos.
Dichos contratos fueron entregados a empresas como Geomax, Ingeniería Civil con Excelencia, JESA Ingeniería, Grupo Selome, CIVILTRANS, FICAMSA Ingeniería y Construcciones y Diseños del Centro, entre otras.
Entre las irregularidades en los procesos de contratación, una de las auditorías detalló que las empresas añadieron en las ofertas gastos improcedentes, ya que varios conceptos integrados en los trabajos a ejecutar no se desarrollaban en el campo de acción; así como duplicidad en cargos, porque se solicitaron recursos para el pago de honorarios, sueldos y prestaciones para un mismo puesto en distintos rubros.
También detectaron costos excesivos en rubros como materiales, mano de obra y equipo, así como falta de justificación en rubros integrados en las propuestas.
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Tras los hallazgos en las auditorías, el Órgano Interno de Control recomendó a ambas dirección de la SICT girar instrucciones a las áreas responsables para que se apliquen medidas correctivas y preventivas.
Este diario consultó a la dependencia federal sobre los hallazgos de las auditorías y las correcciones realizadas, pero al cierre de esta edición no obtuvo respuesta. Para el ejercicio 2023, ambas direcciones suman un presupuesto de 25 mil 368.2 millones de pesos, un alza de 21 por ciento respecto al año pasado y el mayor monto en conjunto en lo que va de la presente administración.