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El supermercado que el mexicano Ricardo Weder pretende hacer triunfar no tiene paredes o techo, tampoco un estacionamiento ni sucursales abiertas al público. Principalmente armado con tecnología es como este emprendedor se ha impuesto el reto de plantarle competencia a las mayores cadenas que hoy dominan el escenario del retail.
“La tecnología ha ayudado a los supermercados a ser mucho más eficientes en sus procesos y a conocer mejor a sus usuarios, pero el modelo operativo, si lo piensas, debido a su complejidad no ha cambiado durante décadas, es una industria de grandes volúmenes y márgenes súper bajos con altos activos fijos.
“Lo que buscamos es revolucionar la industria, queremos entregarte pedidos completos, pedidos a tiempo, con una mejor calidad de frescos y a precios súper competitivos y la forma en la que nace Jüsto como el primer supermercado 100 por ciento online en México y pionero en Latinoamérica”.
Jüsto es una plataforma en la que cualquier persona puede hacer las compras del súper desde su computadora o teléfono. A diferencia de otras plataformas, Jüsto no se limita a ir a los supermercados en busca de los productos que la gente busca, sino que cuenta con una red propia de centros de abasto donde sus repartidores encuentran todo lo que se podría necesitar: productos de limpieza, cuidado personal y de alacena, así como carnes, frutas y vegetales frescos.
Los usuarios de Jüsto tienen su disposición un catálogo de más de cuatro mil de productos de los cuales escoger, realizan el pago con tarjeta de crédito y establecen una hora y lugar donde los repartidores de la empresa llevan los productos que han sacado directamente de los centros de abasto.
Al no depender de grandes cadenas como Walmart, Soriana o La Comer para su abasto, o de intermediarios de entrega como Cornershop, Rappi o Postmates, Jüsto puede ofrecer precios más económicos para sus clientes, los cuales también encuentran valor en la conveniencia de no tener que ir a un supermercado físico a hacer sus compras.
“Nosotros no queremos ser un supermercado de nicho, queremos ser un supermercado masivo. No es un modelo que vaya a eliminar a los supermercados, pero imagínate que nosotros logramos que selecciones los precios y la calidad justo como si fuéramos una abuelita o tu mamá. Es lo que queremos y nuestro modelo me da esa confianza y mientras vayamos creciendo cada vez más, vas a poder hacerlo”. Un componente vital del modelo de Jüsto es su cercanía con empresarios pequeños y medianos, los cuales representan 25 por ciento de los productos que se venden en la plataforma y que generalmente no tienen acceso a los anaqueles de grandes cadenas de supermercados.
Esto, por ejemplo, permite que Jüsto pueda vender productos frescos de primera calidad, a granel y sin intermediarios que acaparen las ganancias de los productores y transfieran el costo a los consumidores.
“Tenemos a las marcas grandes, pero también estamos dando mucho juego a marcas pequeñas, productores pequeños que normalmente no venden en autoservicio por las condiciones comerciales que esto les impone en términos de pago, volúmenes, promociones y descuentos.
“Queremos desintermediarizar la industria y queremos buscar que el mayor beneficio lo tenga la gente que realmente produce, pues muchas veces ese valor se queda a lo largo de la cadena”.
DELIVERY ES EL JUEGO
Ricardo es un veterano bien conocido de la industria tecnológica. Luego de haber trabajado en HSBC durante tres años como vicepresidente de planeación estratégica, se convirtió a partir de 2013 en un referente de los servicios de movilidad al dirigir las operaciones en México de la brasileña Easy Taxi, la cual se fusionó con Cabify en diciembre de 2014.
Primero como CEO en México de Cabify, y más tarde como manager general de Latam y presidente global, Ricardo supo de primera mano lo que significa competir con un gigante como Uber y articular una propuesta de valor que logre diferenciarse en un mercado altamente competido. Durante su administración, Cabify pasó de estar sólo en cuatro ciudades a más de 100 y centró su propuesta en la seguridad, con la implementación de los primeros botones de pánico para usuarios, y mayor calidad en la atención al cliente.
“El tema que teníamos nosotros era que la diferencia de presupuesto que teníamos frente a Uber era abismal y todo el equipo aceptamos ese reto de cómo generamos un diferenciador frente a las condiciones de mercado tan hostiles. Aprendí muchísimo, cometí muchos errores, pero me dio esa realidad de que cuando tienes la pasión y te juntas con personas con talento y más inteligentes que tú puedes lograr grandes cosas”.
Según explica, el modelo operativo de los supermercados actuales genera desequilibrios entre los pequeños proveedores y las tiendas, desperdicios de comida, ineficiencia en los traslados de mercancía, contaminación y quita tiempo a personas que deben ir a hacer sus compras.
Mientras lideraba las operaciones de Cabify, Ricardo identificó que los problemas de suministro, logística, entrega y servicio al cliente aún se pueden encontrar en los supermercados mexicanos, por lo que abandonó su puesto y decidió iniciar Jüsto luego de haber sentido que su ciclo había terminado.
En octubre de 2019, la firma de capital de riesgo Mountain Nazca lideró una ronda de inversión junto a los fondos de inversión Foundation Capital y FEMSA Ventures, en la que se levantaron 10 millones de dólares semilla para echar a andar a Jüsto. Previamente los fondos Foundation Capital, Quiet Capital, Vas Venture, 500 Startups y algunos inversionistas ángeles ya habían inyectado capital en una ronda inicial.
“Nos toca demostrar de lo que estamos hechos, Walmart es más grande que Uber, entonces no le tenemos miedo a los grandes competidores”.
FRESCO Y COMPLEJO
El modelo sin intermediarios de retail y delivery de Jüsto ofrece a los usuarios una experiencia de compra sencilla y económica. Sin embargo, esto viene con un costo, según explica Ricardo.
Jüsto cuenta con los retos logísticos de una central de abastos en cuanto al contacto y relación con los proveedores, los problemas de almacenaje de una gran cadena de supermercados, y las complejidades de una empresa de delivery.
Jüsto ha apalancado en buena parte su imagen en la entrega de carnes, verduras y frutas en la puerta de los usuarios justo como ellos los piden. Es aquí donde tener los productos en buen estado de maduración, en las cantidades necesarias, con frescura y como al cliente le gusta ha sido todo un reto y ejemplifica de buena manera los múltiples retos que la plataforma debe sortear.
“La mayor limitante para la compra de supermercado en línea ha sido la calidad de los frescos y creemos que mucho es porque los usuarios no tienen una alternativa adecuada a la experiencia que pueden tener en un mercado.
“Entonces, si logramos crear esa experiencia no haría tanto sentido seguir yendo a un supermercado para las personas que no lo disfrutan”.
Según explica, la manera en la que Jüsto le hace frente a la complejidad de surtir al mercado mexicano es mediante el análisis de patrones de consumo. Mientras los usuarios de la plataforma hacen sus pedidos, ésta va aprendiendo qué piden, cuándo, cómo y a dónde debe ser entregado. Es así como la data generada en la plataforma alimenta las órdenes a proveedores o le dice a Jüsto qué centros de distribución deben tener qué productos. En el caso de los perecederos, esta información reduce los desperdicios y aumenta los márgenes de ganancia.
“Podemos desarrollar mucha tecnología a partir de estos datos porque entre 80 y 90 por ciento de las compras que haces en el supermercado son siempre lo mismo y de hecho si no vas al supermercado te ahorras entre 20 y 25 por ciento por las compras instintivas y que ya no haces. Con esa distribución tan marcada que te da el consumo de productos te permite personalizar una propuesta de valor para cada uno de los usuarios.
“Somos una empresa de tecnología, una empresa de datos, entonces creemos que hay un montón de áreas de oportunidades a lo largo de la cadena. Tú piensa que en ella se llega a perder hasta 62 por ciento de los frescos, imagina qué tan ineficiente es”.
Con cuatro centros de distribución sólo en la Ciudad de México, según explica Ricardo, entre los objetivos a corto plazo está comenzar la expansión en las principales ciudades del país.
Más adelante –dice– también se tienen planes de expansión hacia otros países latinoamericanos, en tanto que, poco a poco, la plataforma irá añadiendo funcionalidades para los clientes, las cuales aún se encuentran en la mesa de diseño.
Aunque cadenas del retail a cuentagotas apuestan por la venta mediante canales digitales, como Walmart, Ricardo asegura que Jüsto, al ser una empresa basada en tecnología, puede adaptarse a los cambios más rápido y de manera más eficiente que sus competidores.
“Es una complejidad bastante grande y por eso no ves que surjan cadenas cada dos años, pero creemos que si lo logramos la tecnología y los procesos para aprender y resolver esos problemas realmente la oportunidad que tenemos de cambiar las cosas es bastante grande.
“Tenemos la misión de ser el supermercado favorito de Latinoamérica y la visión es revolucionar la industria del consumo en supermercados, generando prácticas justas. Parte importante de todo esto es que queremos demostrar que en México tenemos el talento para desarrollar tecnología y competir con las empresas más grandes del mundo”.