La Secretaría de Economía (SE) descartó que la prohibición del uso e importación de maíz transgénico vaya a tener algún impacto sobre el comercio del país.
Lo anterior fue señalado por la dependencia luego de que el gobierno federal publicó este lunes en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un decreto para revocar permisos y prohibir nuevas autorizaciones de liberación al ambiente de semillas de maíz genéticamente modificado.
“El decreto prohíbe el uso de maíz genéticamente modificado para la masa y la tortilla. Lo anterior no representa afectación alguna al comercio ni a las importaciones, entre otras razones, porque México es de sobra autosuficiente en la producción de maíz blanco libre de transgénicos.”, dijo la SE en un comunicado.
La medida del gobierno federal, que entra en vigor este martes, busca la protección del derecho a la salud y a un medio ambiente sano así como al maíz nativo, a la milpa y a la riqueza biocultural de las comunidades campesinas y del patrimonio gastronómico, de acuerdo con el documento publicado en el DOF.
La SE subrayó que el decreto se acota estrictamente al maíz utilizado para el consumo, es decir, que se requiere para la producción de masa y tortilla, mientras que productos como canola, la soya, el algodón y el resto de las materias primas no quedan sujetas a esta regulación.
“En cuanto al uso de maíz genéticamente modificado para el forraje y la industria, se elimina la fecha límite para prohibir su uso, quedando sujeto a que exista suficiencia en el abasto”, añadió.
La dependencia federal puntualizó que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), en conjunto con agencias sanitarias de otros países, realizará investigaciones sobre los posibles impactos en la salud de las personas del maíz genéticamente modificado, con lo cual México da cumplimiento al T-MECen materia de decisiones fitosanitarias basadas en evidencia científica.