El principal sindicato de Estados Unidos se opone a la ratificación del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (TMEC), porque duda que México imponga las reformas laborales que exige el acuerdo, dijo Richard Trumka, presidente de la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO, por sus siglas en inglés).
El representante señaló que es poco probable que el Congreso apruebe el TMEC hasta que México logre mayores avances en el tema laboral. "Si consiguen cambiar las leyes laborales según lo estipulado por el acuerdo, luego tienen que demostrarnos que tienen la infraestructura y los recursos para implementarlas", mencionó Trumka en un evento organizado por The Economic Club of Washington, un foro para líderes en la capital estadounidense.
El TMEC todavía tiene que ser ratificado por los congresos de los tres países.
Los demócratas han expresado preocupaciones similares a las de Trumka, mientras que un republicano clave del Senado, Chuck Grassley, ha exigido que se levanten los aranceles al acero y al aluminio antes de cualquier votación, algo que el presidente Donald Trump se resiste a hacer.
Trumka dijo a periodistas que se opone a los aranceles sobre las importaciones de metales de México y Canadá. "Creemos que los aranceles deberían usarse para perseguir a los infractores y, francamente, ninguno de los dos países viola el acuerdo", comentó.
México ha avanzado en la legislación para cumplir con las obligaciones del TMEC: la reforma laboral fue aprobada por la Cámara de Diputados el 11 de abril y actualmente está bajo análisis del Senado.
Pero Trumka confió en que el Congreso de Estados Unidos no apruebe una legislación para implementar el TMEC sin atender antes las preocupaciones sindicales estadounidenses.
Afirmó que "falsos sindicatos" mexicanos afiliados al gobierno habían negociado 700 mil contratos colectivos ilegítimos diseñados para bajar los salarios locales.
"Eso significa que tendrán que cambiar 175 mil (contratos colectivos) al año durante los cuatro años que se les ha otorgado en el acuerdo y tendrán que tener 175 mil elecciones" sindicales para aprobarlos, detalló. "Queremos ver su capacidad para hacer eso", añadió Trumka.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador asegura que la reforma será aprobada y estará implementada en cuatro años.
"Es una legislación muy avanzada que se está pasando este mes", afirmó en rueda de prensa Jesús Seade, subsecretario para América del Norte de la cancillería mexicana y exnegociador del T-MEC, de visita en Washington desde principios de abril para promover la ratificación del tratado trilateral.
Este martes, Trumka dijo que algunos de los cambios que piden para el T-MEC pueden abordarse en la legislación para implementarlo, pero otros podrían requerir la reapertura de las conversaciones comerciales que concluyeron en noviembre.