La aerolínea Emirates Airlines rechazó la acusación de haber recibido subsidios, la cual resurgió después de que anunció esta semana su vuelo diario entre Dubái y la Ciudad de México a través de Barcelona.
Andrés Conesa, presidente de Grupo Aeroméxico, consideró decepcionante que el gobierno mexicano permitiera la entrada de Emirates al mercado nacional con esa ruta.
“No es justo, no es la medida correcta, pero haremos todo lo que se encuentre en nuestras manos para tomar las acciones legales para intentar que esto no pase”, señaló Conesa.
En el mismo sentido se pronunció a finales de mayo del año pasado, cuando el empresario anunció que darían la batalla legal para impedir la llegada de Emirates. "Si venden boletos subsidiados a nosotros nos sacan del mercado. Si nos sacan y no somos competitivos en nuestros vuelos a Europa, vamos a tener que reducir la oferta", dijo en esa ocasión.
Hoy, Emirates fijó postura. “Nadie” ha encontrado fundamentos para las acusaciones de “los competidores” en su contra, ya sea sobre el combustible subsidiado, el apoyo financiero oculto, las tasas aeroportuarias, las condiciones del personal o la regulación ambiental.
Hemos desacreditado repetidamente varias acusaciones de los competidores sobre los subsidios y las condiciones de explotación "injustas", aseguró la aerolínea que iniciará el vuelo mencionado el 9 de diciembre.
Aeroméxico opera a Barcelona desde el pasado 15 de junio.