En abril, 2.1 millones de mexicanos no tenían trabajo, pero lo estaban buscando, según la encuesta telefónica experimental de ocupación y empleo que realizó el Inegi en medio de las restricciones impuestas por la pandemia.
De acuerdo con el reporte del Inegi, con esa cantidad de personas sin empleo, la tasa de desocupación fue de 4.7 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), superior en 1.7 puntos porcentuales respecto al mes inmediato anterior y en 1.2 puntos porcentuales mayor a la de abril del año pasado.
Sin embargo, el Inegi aclaró que las cifras del reporte no son estrictamente comparables en su forma de implementarse con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), que se realiza cara a cara, ni con la amplitud y precisión estadística a que da lugar la muestra de esta última.
En el resultado del ejercicio telefónico destaca que el mes pasado 20 millones de personas no tenían un empleo y tampoco lo buscaban, debido a que estaban en espera de volver a retomar sus actividades. Esa cifra es muy superior a los 5.9 millones de personas que se encontraban en esa condición en marzo de 2020.
La encuesta telefónica mostró otro aspecto de las condiciones inusuales del mercado laboral. La duración de la jornada de trabajo disminuyó durante abril de 2020, destacando el incremento de los ausentes temporales sin vínculo laboral, que pasó de 1.7 por ciento de la población ocupada en marzo a 21.9 por ciento en abril.
Asimismo, quienes trabajaron menos de 15 horas pasaron de 6.1 por ciento en marzo a 10.9 por ciento en abril.
En cambio, quienes trabajaron más de 35 o más horas a la semana se redujo de 74.8 por ciento en marzo a 48.3 por ciento en abril.
De la población subocupada, es decir las personas ocupadas que tienen la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual les demanda, pasó de 5.1 millones en marzo a 11 millones en abril.
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